- Iniciamos una serie sobre donación de órganos, a propósito de su día.
- La historia de la familia Flórez Naranjo, ejemplo de solidaridad.
- Primero donaron y luego una tía de la familia recibió un hígado.
María Isabel Molina V.
Medellín
La familia de Juan Esteban Flórez Naranjo no se imaginó que después de haber autorizado la donación de varios órganos del joven, seis años más tarde otro miembro de su familia encontraría un donante que le salvó la vida.
Así lo recuerda Martha Consuelo Espinal de Naranjo, abuela de Juan Esteban, de 16 años, quien falleció en un accidente, y madre de Adriana María, a quien el año pasado le hicieron un trasplante de hígado que le salvó la vida.
Cuando Juan Esteban murió, Martha Consuelo, quien por 12 años fue voluntaria en la Unidad Renal del Hospital San Vicente de Paúl, le sugirió a su hija Martha Luz, madre del joven, donar los riñones. "Ella, a pesar de su dolor tan grande, me dijo: Mami, podemos donar no sólo los riñones sino todos sus órganos porque él era joven y muy sano".
Al día siguiente de la muerte de Juan Esteban, su familia avisó que donarían sus órganos. Encontraron seis personas en la Clínica Cardiovascular Santa María, que recibieron los riñones, los pulmones, el corazón y las córneas.
El caso de Adriana
La persona que recibió el corazón, un joven de 24 años, estaba muy agradecido porque gracias a la donación salvó su vida. Él se casó y tuvo un hijo, y Martha Luz fue la madrina de bautizo.
Además tuvieron contacto con un bogotano y una señora venezolana, que recibieron los riñones, y cada seis meses venían a Medellín para la revisión. "Estaban muy agradecidos", afirmó Martha Consuelo.
Seis años después de la muerte de Juan Esteban, en el 2004, el gesto generoso de su familia se vio aún más recompensado. Adriana María Naranjo, tía del joven, a quien los médicos le habían aconsejado que no tuviera hijos, quedó en embarazo. A las 32 semanas nació su niña. Después del parto se le daño el hígado y empezó a crecer de tamaño. Adriana estaba al borde de la muerte.
El 3 de octubre de 2004 ,Adriana, quien vive en Estados Unidos, se vino para Medellín en busca de tratamiento para su enfermedad. Le aconsejaron el trasplante de hígado.
En el Pablo Tobón
En el Hospital Pablo Tobón Uribe (HPTU) encontró la ayuda del Equipo de trasplantes que dirige el doctor Gonzalo Correa. El 20 de noviembre de 2004 tuvo la suerte de encontrar un donante de hígado. La cirugía fue un éxito y el médico le dijo que el órgano es tan compatible con su organismo, que parecía que no fuera ajeno.
"Hoy ella está muy aliviada y feliz. Volvió a Estados Unidos y su hija ya tiene un año. Quiero destacar la gran labor que realiza el médico Gonzalo Correa y su equipo de profesionales en el Hospital Pablo Tobón Uribe, por la gran calidad humana y científica para con mi hija y en general para todas las personas que acuden en su ayuda", afirmó Martha Consuelo.
Agregó que la grandeza de Dios se reflejó en su familia. "Cuando uno hace un acto de generosidad, de alguna manera la vida lo recompensa. Quiero aconsejar a todas las personas que no duden en donar sus órganos, que pueden servirle a otras personas que los necesitan para vivir", indicó Martha Consuelo.
Con la ANT
Martha Consuelo expresó que es necesario desprenderse de los seres queridos cuando mueren y considerar que sus órganos pueden servir para otras personas, en vez de ser enterrados o cremados.
Su familia, que integran cuatro hijos: Hernán Darío, Carlos Mario, Adriana María y Martha Luz, es muy consciente de fomentar la cultura de donación de órganos y le ha ayudado a conseguir donantes.
Ella colabora con la Asociación Nacional de Trasplantados (ANT), asiste a las reuniones y les ayuda en su tarea de divulgación.
Para Martha Consuelo, quien encuentra felicidad en servir a los demás, la donación de órganos es tan importante, porque "permite que la vida perdure".
Qué órganos se pueden trasplantar
Un trasplante es un procedimiento quirúrgico que consiste en reemplazar un tejido u órgano por otro que cumple plenamente su función, de esta forma se salvan vidas.
En Medellín se realizan trasplantes de corazón, riñón, hígado, pulmón, páncreas, médula ósea, laringe, tráquea, intestino, células madre, hueso, piel y córnea.
En vida una persona puede donar un riñón, una porción del hígado y parte de su médula ósea. Esto se puede hacer sólo entre familiares (padres, hijos o hermanos), siempre y cuando exista un alto grado de compatibilidad genética entre donante y receptor. Recuerde que al donar sangre puede contribuir a salvar muchas vidas.
Fuente: Asociación Nacional de Trasplantados.
