Mariana Pajón estiró la mano y el hombre se quedó frío. Perplejo.
Jeremy Browne, el Ministro de la Cancillería Británica para América Latina no salía del asombro, al ver el gesto digno del protocolo y la cortesía, esa que siempre será invitada especial cuando estén de por medio diplomáticos de la Gran Bretaña, sede de los Juegos Olímpicos de Londres en unos meses.
A la cita llegaron los que ya tienen cupo, los que saben que están a un paso y los que apenas van por el espacio en la olimpidada. La preselección completa de levantamiento de pesas (hoy tienen un chequeo para saber quiénes van a una concentración), una docena de atletas entre clasificados y aspirantes, así como los ciclistas Carlos Mario Oquendo, Mariana y Juan Esteban Arango, llegaron a la sede de formación continua de UPB enla sede de El Poblado.
La idea de la embajada británica es que tanto los clasificados como los opcionados adelantaran los trámites de toma de huellas digitales, fotrografías y formatos de entrada, para hacer mas ágil su ingreso a la sede de los Juegos. Y claro, un momento con el Embajador en Colombia.
“Nos dieron un par de charlas de lo que nos vamos a encontrar cuando vayamos a Londres, una charla no muy grande”, explicó Carlos Oquendo, quien pelea por uno de los dos puestos de los varones en el bicicrós. Le fue bien tras ser tercero en la válida latinoamericana en Brasil.
Y mientras los atletas paisas le seguían la huella al Ministro, Browne buscaba afanosamente el backing en el que estaba inscrito el nombre de Londres, para tomarse las fotos de rigor, en medio de la mancha amarilla.
“¿Quién ganará oro?”, fue la pregunta del funcionario, quien tuvo la respuesta de Wanner Miller, quien como intérprete les contó a sus compañeros. Muchos dijeron yo, pero escaleras abajo, Mariana le mostró el camino derecho a su pregunta.