El caso es un poco extraño. Las Perlas Uribistas , un libro de Random House Mondadori, duró varias semanas en el primer lugar de ventas y ahora ocupa el segundo lugar después de Los Hombres que no Amaban a las Mujeres , el sonado best seller de la trilogía Milenium.
No ha tenido reseñas en la prensa, ni está acompañado de una campaña publicitaria. Su venta ha ido creciendo silenciosamente en un país donde la difusión de un libro es una verdadera proeza.
Los libreros que consulté me dicen que algunos lectores buscan el libro pensando en que se trata de un gran elogio al gobierno de Uribe y otros, un poco más informados, lo solicitan con la expectativa de encontrar una serie de artículos críticos al Presidente. La mayoría termina comprándolo, aún después de comprobar que quizás no era lo que buscaban.
Pero a mí me toca decir la verdad en esta columna. No es un libro equilibrado. No se trata de un balance del Gobierno mostrando tanto sus logros como sus graves fallas. No está escrito por personas que respalden o se propongan ser neutrales frente a Uribe.
Se trata de un grupo de periodistas críticos del Gobierno. Cada uno escogió el tema que más lo perturbó a lo largo de los dos mandatos de Uribe. Cada uno acudió a sus investigaciones previas para entregarle al lector un pequeño ensayo sobre algunos de los hechos más escandalosos de los últimos tiempos.
Los autores son: Daniel Coronell, Ramiro Bejarano, Juan Camilo Restrepo, Felipe Zuleta, Vlado, León Valencia, Germán Navas, Cecilia Orozco, Alfredo Molano, Iván Cepeda, Adam Isacson y Holman Morris. Los temas van desde los negocios de Tomás y Jerónimo, los emprendedores hijos del Presidente, hasta los falsos positivos y las "chuzadas del DAS".
Allí están los lunares más oscuros de la administración que está a punto de terminar. Allí están los grandes desaciertos de un Gobierno contradictorio que amasó por igual éxitos sonoros y graves derrotas. Allí está la mirada sagaz de escritores con talento y dedicación a opinar sobre los más espinosos temas de la realidad nacional.
El libro, en todo caso, retrata la polarización del país. Nadie quiere tomar distancia de la coyuntura. Nadie le apuesta a mediar. Los partidarios del Presidente cierran sus ojos frente a los errores del Gobierno y sus críticos no quieren saber nada de los aciertos. Quizás los años permitan construir una perspectiva distinta, una noción intermedia, una visión menos drástica de todo lo ocurrido. O quizás el tiempo se encargue de oscurecer aún más el panorama.
Por ahora los lectores tendrán que acercarse a los libros que hablen del actual Gobierno con ojos avizores y con un espíritu muy independiente, tratando de hacerse a una visión propia. No será fácil. La niebla de la polarización deja muy poco espacio para la objetividad.
Pero estamos a cien días del último día de gobierno y es muy importante hacer un corte de cuentas. Este libro es un buen abrebocas para la reflexión. Allí podrá encontrar el lector una explicación de los errores que cometió el presidente Uribe en su relación con Estados Unidos en boca de Adam Isacson, un experto en la política de Washington hacia Colombia.
Podrá entender un poco las razones que tuvo el Gobierno para hacer grandes concesiones tributarias a los empresarios y las consecuencias fiscales que ha tenido esa política, en el artículo de Juan Camilo Restrepo, una persona que logra llegar al lector común y corriente en un tema tan aburridor como abstruso.
No me cabe la menor duda de que una gran difusión de este libro obligará a los escritores partidarios del Gobierno a emprender la tarea de poner negro sobre blanco las principales realizaciones de Uribe y también a responder a las graves acusaciones que se hacen en las Perlas Uribistas.
Será un gran contrapunteo donde el ganador será el lector que podrá hacer su propio juicio con mayores elementos.
Pico y Placa Medellín
viernes
0 y 6
0 y 6