Tras el Mundial de 1994, Colombia inició la exportación en masa de futbolistas. En eso coinciden técnicos y jugadores al afirmar que, hoy en día, la Selección tiene la base de su grupo en el exterior.
Según los entendidos, el aspecto que impulsó el fenómeno tuvo que ver con la revolución que generó la camada que clasificó a los mundiales de 1990, 1994 y 1998.
A lo que se le sumó la globalización de los medios de comunicación y la llegada del internet. “Antes era muy difícil ver a jugadores de otro país y hacerles seguimiento pero, tras esa masificación, se hizo mucho más fácil referenciar a un futbolista”, indica el exseleccionador nacional Javier Álvarez.
Y es que la curiosidad por saber quiénes conformaban aquella Selección que goleó 5-0 a Argentina y llegó como favorita al Mundial del 94, también hizo girar los ojos de los empresarios hacia el país.
Otro factor que impulsó esa migración fue la actuación de jugadores como Faustino Asprilla y Adolfo “Tren” Valencia en grandes clubes de Europa que valorizó al futbolista nacional.
Después fueron Óscar Córdoba, Mauricio Serna, Jorge Bermúdez y Juan Pablo Ángel, quienes continuaron abriendo puertas. No obstante, el cambio no sólo se dio en la exportación sino en el estilo de juego.
“En la actualidad veo una Selección de mayor nivel por los que están en el exterior que se acostumbraron a una mayor exigencia. La del 94 nos dio ese nombre y respeto, pero ahora ese estatus se potencializa con los internacionales”, dice John Javier Choronta Restrepo, quien también vistió la tricolor.
Es cierto que en la época de Francisco Maturana y Hernán Darío Gómez había mayor tiempo de trabajo pues la base era local lo que facilitaba reunir periódicamente a los jugadores. Hugo Gallego, quien junto a ellos fue gestor de esa época dorada, explica que con el paso del tiempo la figura del técnico pasó a ser la de un seleccionador: “la buena escogencia prima sobre el trabajo táctico”.
Hoy el técnico José Pekerman combina los dos aspectos: le dio continuidad a una base de jugadores -que actúan en el exterior y que acumulan varias convocatorias juntos- y consolidó un grupo gracias a la mecanización de los movimientos.
Estos factores contribuyeron a que la Selección tuviera un estilo de juego más vertiginoso pero con grandes finalizadores como Falcao García, Teófilo, Gutiérrez, Jackson Martínez y Carlos Bacca, entre otros.