<img height="1" width="1" style="display:none" src="https://www.facebook.com/tr?id=378526515676058&amp;ev=PageView&amp;noscript=1">
x
language COL arrow_drop_down

“Mi intención es que el año que viene sea el último de mi carrera”: Nadal le pondrá punto final a su historia en el tenis

El tenista español ha tenido que luchar con varias lesiones en los últimos años que han mermado su rendimiento deportivo. El problema físico más grande que tiene es que padece, en su pie izquierdo, la enfermedad crónica de Müller Weiss.

  • Rafael Nadal (36), ha ganado 22 torneos de Grand Slam y es, junto a Djokovic, el más ganador de la historia del tenis masculino . FOTO: GETTY
    Rafael Nadal (36), ha ganado 22 torneos de Grand Slam y es, junto a Djokovic, el más ganador de la historia del tenis masculino . FOTO: GETTY
18 de mayo de 2023
bookmark

Con una timidez opuesta a la seguridad e imponencia que mostraba en las canchas de tenis, el español Rafael Nadal dio a conocer que su retiro del deporte a nivel profesional sería en 2024. Lo dijo en una rueda de prensa que dio desde la escuela que lleva su nombre, ubicada en Manacor, Mallorca, España.

“Rafa”, que no juega desde el 17 enero de este año, cuando sufrió una lesión en la cadera en el partido de la segunda ronda del Abierto de Australia mientras enfrentaba al estadounidense Mackenzie McDonald, empezó diciendo que se había esforzado durante todos estos meses para poderse recuperar, pero que esto no había dado fruto, por lo que tenía que poner en pausa su carrera.

Ese punto y aparte, como dijo Nadal, llevó a que por primera vez en 18 años, el español decidiera no jugar el Roland Garros, torneo del que ha sido campeón 14 veces y es el tenista que más veces lo ha ganado en la historia. El Grand Slam francés empezará el próximo 22 de mayo.

“Intentaré regenerar mi cuerpo en los meses que vienen. No voy a poner una fecha de regreso. (...) Mi intención es que el año que viene sea el último de mi carrera y lo quiero afrontar con las garantíais de poder disfrutarlo y soy consciente de que si sigo jugando en este momento, eso no va a ocurrir”, aseguró Nadal.

Cuando Rafael estaba anunciando que 2024 sería el último año de su carrera dudó, las palabras se le enredaron, no le salían, parecía que él mismo, acostumbrado a ganar, a soportar dolores fuertes, a llevar su cuerpo al límite, a poner a delirar a los aficionados al tenis con sus voleas y reveses, no quería creer lo que estaba diciendo, no podría aceptar que ese momento, al que tanto le había huido, estaba frente a él.

“En 2024 quiero poder jugar los torneos que me apetezcan y poderme despedir de los campeonatos que me han marcado deportivamente durante todos estos años”, agregó Rafael, quien, junto al serbio Novak Djokovic son los tenistas más ganadores de torneos de Grand Slam en la rama masculina (cada uno tiene 22 títulos).

Parar, un buen presagio para Nadal

Ya sabemos que Rafa no jugará el resto del año. Sin embargo no es la primera vez que las lesiones lo marginan de salir a las pistas. En los últimos meses de 2021 confirmó que padecía la enfermedad de Müller Weiss en su pie izquierdo, una patología que genera un dolor crónico en los huesos que llevó a que lo operara en septiembre de ese y se perdiera el final de la temporada.

Cuando Nadal se recuperó, volvió en un nivel que no se le veía desde hacía muchos años: ganó el Abierto de Australia de 2022 arrasando con cualquier rival que le pusieran al frente. Después, en junio, consiguió su título 14 del Roland Garros. Todo eso lo hizo luchando contra el fuerte dolor en el pie izquierdo que produce la enfermedad crónica que sufre.

Parecía que el tenista español era invencible, que su umbral de dolor no tenía límite, que podía aguantar lo que fuera con tal de seguir jugando, ganando. Pero el fantasma de las lesiones volvió a aparecer. Primero se fisuró una costilla. Después tuvo un desgarro abdominal en el partido de los cuartos de final de Wimbledon, cuando derrotó al estadounidense Taylor Fritz, que lo llevó a decidir no jugar la semifinal contra el australiano Nyck Kyrgios.

Volvió para el Abierto de Estados Unidos, pero se veía mermado físicamente. Las molestias seguían ahí. Siguió luchando, haciendo terapia, buscando la manera de mejorarse: quería seguir ganando. Esa ilusión se diluyó en el Abierto de Australia de 2023, con la lesión de cadera, que luego se agravó con el problema en el iliopsoas de la pierna izquierda, que no permitirá que juegue el resto de este año y que lo llevó a pensar, con una timidez que nunca se le había visto, que lo mejor era ponerle punto final a su historia en 2024.

Brandon Martínez González

Estudiante de periodismo de la Universidad de Antioquia. Interesado en el periodismo narrativo y los deportes.

Te puede interesar

Las más leídas

Regístrate al newsletter