El jugador peruano Raúl Ruidíaz aseguró que el polémico gol que eliminó a Brasil de la Copa América Centenario y clasificó a su selección para cuartos de final fue legal porque le dio en el muslo y no en la mano.
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“Fue una jugada muy rápida y me choca en el muslo. No entiendo por qué hubo una polémica porque fue juego limpio”, declaró tras finalizar el partido.
Explicó que, durante la polémica generada cuando el árbitro tardó varios minutos en decidir si el gol era válido o no, los peruanos estaban “molestos e incómodos”, aunque “gracias a Dios”, finalmente concedió el tanto de la victoria.
Según Ruidíaz, Perú estuvo buscando el triunfo “durante todo el partido” hasta lograr su pase a cuartos. De su próximo rival, Colombia, dijo que les espera un partido “difícil” que les obligará a prepararse a fondo “para hacer un buen encuentro”.
El triunfo de Perú supone “felicidad y una enorme alegría para todo un país”, añadió el jugador. “Estamos dándolo todo dentro del campo y se están viendo los resultados”, concluyó.
¿Quién dio por válido el gol de Perú?
¿Quién dio el gol por bueno? Fue el árbitro Andrés Cunha el que señaló el centro del campo, pero sus consultas a través del micrófono se prolongaron durante varios minutos mientras los jugadores de uno y otro equipo trataban de presionarle para que la decisión se decantara a favor de los intereses de su equipo.
¿Con quién habló Cunha? Esa la pregunta clave para saber si la decisión se adoptó a partir única y exclusivamente de lo que el árbitro, con ayuda de su asistente, había visto o si recibió una versión externa de cómo se había desarrollado la acción para que tomara la opción más correcta.
Vista la acción por televisión, dio la sensación de que el árbitro dio inicialmente el gol por bueno cuando a los 72 minutos de juego, una penetración de Andy Polo por la derecha fue resuelta por Ruidíaz, que marcó a puerta vacía.
Mientras los jugadores peruanos festejaban el gol, se dieron cuenta de que el árbitro central consultaba con el asistente y a partir de ahí se dio paso a unos momentos de tensión e incertidumbre porque la decisión definitiva no había sido adoptada.
Las repeticiones en televisión, ofrecidas desde distintos ángulos, hacían pensar en la mayoría de los casos que el balón había sido impulsado con la mano. Tan solo una de ellas daba a entender que el gol podía ser legal.
En cualquier caso, Cunha lo dio finalmente por bueno y, como los peruanos mantuvieron la ventaja hasta el final, suya fue la clasificación, además como primeros de grupo, para los cuartos de final del torneo, al tiempo que Brasil quedaba fuera a las primeras de cambio.
Más allá del análisis de la pobreza del fútbol de Brasil, la polémica ha marcado sus encuentros en la Copa América, ya que a Ecuador se le anuló un gol aparentemente válido ante esta selección. Hoy, por contra, la decisión le ha perjudicado.
Además, en el encuentro Brasil-Perú, el árbitro dejó de pitar en los últimos minutos del primer periodo un penalti a Edison Flores cometido en el área brasileña por Renato Augusto con empate a cero en el marcador.
En una Copa América en la que ha entrado la tecnología para resolver dudas en la línea de gol, ha quedado manifiesta la necesidad de que ésta se aplique no solo para esta jugada.
Si debe usarse la tecnología también debe ser utilizada para decidir si el balón ha rebasado o no una determinada línea del campo de juego o si un gol ha sido marcado con la mano o con otra parte del cuerpo.
El debate queda abierto tras una situación que ha determinado la continuidad o la despedida del torneo de dos selecciones, Brasil y Perú, en una instancia clave de un torneo de primer nivel mundial como es la Copa América.