El juzgado 19 de Bogotá realizó este martes una audiencia para emitir sentido de fallo en contra de los coroneles José Javier Vivas, John Harbey Peña y Nelson de Jesús Arévalo, además del teniente Rosemberg Madrid y el intendente Juan Carlos Leal, quienes estaban acusados porque supuestamente modificaron la escena del crimen del grafitero Diego Felipe Becerra.
En medio de la diligencia, el coronel Nelson de Jesús Arévalo, excomandante de la estación de Policía de la localidad de Suba, en Bogotá, fue condenado por su participación en los hechos: el 19 de agosto de 2011 Becerra recibió un disparo por parte del patrullero Wilmer Antonio Alarcón en el norte de Bogotá. Según la jueza, Arévalo tuvo conocimiento de lo sucedido y avaló que se pusiera el arma en la escena del crimen, con intención de hacer parecer que Becerra la estaba portando cuando lo asesinaron.
Igualmente fueron sentenciados el teniente Rosemberg Madrid, el intendente Juan Carlos Leal, el patrullero Wilmer Antonio Alarcón (condenado a 37 años de prisión por el homicidio del joven) y el abogado Héctor Hernando Ruiz.
En el sentido de fallo, que será apelado esta tarde por la defensa de los uniformados, se determinó que los policías tuvieron participación en la manipulación de los elementos materiales probatorios para desviar la investigación y señalar a la víctima de cometer actos delincuenciales que justificarían la acción policial.
Así entonces, la participación del abogado Héctor Hernando Ruiz, quien fungía como asesor jurídico de la Policía de Bogotá, habría consistido en dar la idea de conseguir el arma en el mercado negro para posteriormente “sembrarla” en el lugar y así realizar un informe oficial para relacionar el elemento encontrado con el joven.