La Gobernación de Antioquia anunció ayer las medidas restrictivas a la movilidad que regirán durante esta semana para contener el pico de contagios de coronavirus. Hasta el martes 11 de mayo, el departamento tendrá toque de queda nocturno, ley seca, pico y cédula, y un cierre total durante el próximo fin de semana, según informó el gobernador encargado Luis Fernando Suárez.
El toque de queda nocturno y la ley seca iniciarán desde las 8:00 p.m. hasta las 5:00 a.m., a partir de hoy y hasta la madrugada del martes 11 de mayo. Según detalló la gobernación, a partir de las 8:00 p.m. de este viernes comenzará un cierre continuo que se extenderá hasta las 5:00 a.m. del lunes 10 de mayo, con el objetivo de evitar la movilidad durante la fecha tradicional del Día de la Madre.
De igual forma, durante esta semana, estará vigente un pico y cédula de dos dígitos, organizado de la siguiente manera: martes, 0-1; miércoles, 2-3; jueves, 4-5; viernes, 6-7; sábado, 8-9; domingo, 0-1; y lunes, 2- 3.
Durante la presentación de estas medidas, el gobernador Suárez sostuvo que, pese a la alta ocupación hospitalaria, el comportamiento de indicadores como el porcentaje de positividad y el número de casos activos demostrarían que el departamento podría ir aflojando gradualmente las restricciones.
“Las cifras siguen siendo favorables, con tendencia a la reducción en el número de casos diarios, en el índice de positividad y en la movilidad, que terminó en abril en un 67%”, argumentó el mandatario, señalando que mientras el mes pasado Antioquia tuvo cerca de 27.621 casos activos, ese número se había reducido a 19.224 el fin de semana.
“Gradualmente seguiremos bajando las medidas si las cifras siguen mostrando la tendencia a la reducción”, agregó Suárez, informado que la medida de cuatro días de apertura por tres de cierre (4/3) será reemplazada por una de cinco días de apertura por dos de cierre (5/2).
Reacciones divididas
Cabe recordar que esta decisión llega luego de una semana en la que el sistema hospitalario continúa con una alta ocupación en sus Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).
De acuerdo con el último reporte del Centro Regulador de Urgencias y Emergencias (Crue) de Antioquia, hasta anoche, la ocupación promedio de las UCI regionales era del 98,02 %, lo que equivale a que de las 1.462 camas UCI habilitadas, al menos 1.433 se mantenían ocupadas.
Para esa fecha, las subregiones con la mayor demanda de servicios continuaban siendo el Valle de Aburrá, con una ocupación del 98,04%; el Oriente, con una ocupación del 99,29 %; y el Urabá, con una ocupación del 96,10 %.
En materia de contagios, desde el viernes 30 de abril hasta el lunes 3 de mayo, el departamento había registrado 10.221 casos nuevos, manteniendo un promedio diario por encima de los 2.500 casos.
En cuanto al número de personas fallecidas, durante esos últimos cuatro días se registraron 385 decesos, para un acumulado de 10.003 fallecimientos desde el comienzo de la pandemia.
“Estamos pasando por la peor crisis de salubridad. No se tienen los recursos, el personal, ni la infraestructura para dar respuesta a esa demanda”, dijo Nathalia Suárez Sanabria, epidemióloga y docente de la Universidad CES, para quien la escasez de varios insumos médicos, principalmente de oxígeno medicinal, hacen más preocupante el panorama.
Según advirtió la docente, la persistencia de aglomeraciones en el transporte público y la llegada de nuevas variantes han impedido que la transmisión del virus se corte.
Aunque para la experta la decisión de restringir la movilidad durante el fin de semana es acertada, consideró que aún es muy temprano para plantear que el comportamiento de las cifras den cuenta de una mejoría significativa, tal como planteó el gobernador. Bajo esa misma visión, los líderes de varias agremiaciones médicas insistieron en su llamado a la Gobernación para que se declare una cuarentena total.
“La situación de camas UCI continúa crítica, por eso el llamado que hacemos es a extremar las medidas de autocuidado y evitar aglomeraciones”, dijo Carlos Valdivieso, presidente del Colegio Médico de Antioquia, insistiendo en que para esa organización es necesaria una cuarentena.
Germán Reyes Forero, presidente de la seccional Antioquia de la Asociación Médica Sindical (Asmedas), enfatizó por su parte que la escasez de medicamentos como opiáceos, relajantes musculares, anticoagulantes y oxígeno medicinal, son factores que evidencian la necesidad de establecer un cierre de 14 días.
“Desde un punto de vista estadístico, para analizar una tendencia uno tiene que estudiar un rango de tiempo más amplio. Si comparamos las últimas tres semanas vemos que los indicadores no han disminuido de forma significativa”, planteó Reyes Forero.
Críticas de comerciantes
Mientras el sector médico consideró que los cierres parciales no son suficientes, desde los gremios económicos se cuestionó la decisión de mantenerlos, argumentando que tras un mes de restricciones el comercio ha recibido golpes.
Carlos Esteban Jaramillo Zuluaga, director ejecutivo encargado de Fenalco Antioquia, planteó que la medida de 4/3 implementada durante abril, sumada a las restricciones emitidas en el marco del Paro Nacional, generaron al menos $120.000 millones en pérdidas para el comercio.
“Los empresarios y el comercio en general ya no tienen más aguante, por eso insistimos en la solicitud de una apertura total, con todos los protocolos de bioseguridad”, dijo Jaramillo, señalando que de acuerdo con los estudios económicos de esa federación, cerca del 37 % de los comerciantes consideraba reducir sus empleados para mitigar las pérdidas económicas que vienen acumulando desde las últimas semanas.
De acuerdo con lo planteado por el gobernador Suárez se espera que de continuar el descenso en el número de casos activos y el porcentaje de positividad, la Gobernación continúe con el desmonte gradual de las medidas restrictivas. Esto, pese a las solicitudes de las agremiaciones médicas de extremarlas.
“La medida 4/3 que rigió en el departamento va a seguir dando resultados positivos en los próximos días, pensamos que se va a consolidar esa reducción que venimos observando”, concluyó el gobernador Suárez
10.003
personas fallecieron en Antioquia desde que comenzó la pandemia.