Puntos de vista diferentes tienen la Alcaldía de Medellín y el Instituto Popular de Capacitación, que en su último informe cuestionó las políticas y estrategias de seguridad en la ciudad, las cuales, considera, no están atacando a fondo las grandes estructuras criminales ni están actuando en las causas estructurales de la violencia y la inseguridad.
El IPC parte de considerar un aumento en los homicidios -de enero a junio- en relación con el mismo periodo del año pasado (250 contra 230), tendencia que se mantiene a la fecha de ayer, cuando el total estaba en (324 contra 288), según cifras del Sisc.
“Si bien resulta importante las reducciones de los homicidios, es importante realizar valoraciones objetivas al momento de interpretar las fluctuaciones que se presentan en este indicador, pues las mismas no pueden ser explicadas solo en función de la gestión de una determinada administración municipal, sino que es importante comprender las dinámicas de violencia y las lógicas de los actores armados”, indica el informe. Advierte que la criminalidad disminuye cuando un actor violento se impone sobre otro en la lucha por el control de un territorio.
El IPC señala que los operativos de la Policía y la Alcaldía, a través de la Secretaría de Seguridad, en las comunas 5 (Castilla), 7 (Robledo), 10 (La Candelaria) y el corregimiento Altavista, no han golpeado a fondo las estructuras criminales.
La Secretaría de Seguridad responde que la operatividad realizada sí muestra resultados concretos.