Por 47 años o más, el predio donde está ubicado el Volcán de Lodo de Arboletes fue privado. Pero eso llegó a su fin tras el registro del nuevo propietario del lote, la Gobernación de Antioquia, que con escrituras en mano promete cambiar la cara de este ícono turístico del Urabá.
El acto se llevó a cabo el fin de semana pasado en el municipio costero, pero ya desde hace año y medio se adelantaban inspecciones constantes en la zona, pues el lugar enfrenta un problema grave: la erosión marina que en tres décadas arrasó con tres kilómetros de playa.
El Departamento Administrativo para la Prevención, Atención y Recuperación de Desastres de Antioquia (Dapard) es el encargado de llevar a cabo los trabajos para evitar que el volcán, que ya está a 50 metros del mar, sea arrasado por el agua.
Para ello se destinarán $12.342 millones, provenientes del sistema general de regalías. Sumados a los recursos que invirtió la Gobernación para adquirir los predios y los que desembolsará para hacer adecuaciones que conviertan el sitio y sus alrededores (cerca de 11 hectáreas) en un gran ecoparque, completan cerca de $18.000 millones.
¿Qué se hará en el volcán?
Juliana Palacio, directora del Dapard, explicó que durante seis meses ejecutarán obras para mitigar la erosión, que consisten en la construcción de tres estructuras de tierra y roca, perpendiculares a la línea costera que, sumadas a tres espolones, frenarán el avance del mar.
Estos trabajos, a los que luego se adicionará un cuarto espolón (perpendicular a la costa), permitirán recuperar entre 40 y 50 metros de playa. Además, también se instalarán terraplenes temporales cerca al volcán (luego tendrán que ser cambiados por obras definitivas), para que la formación geológica no pierda estabilidad.
“El fenómeno de la erosión no solo afecta a Arboletes, sino también a los otros municipios del Urabá. Esto es un comienzo, pero el plan es mitigar este fenómeno en toda la región. En este caso concreto las obras ayudarán a que el volcán, que estaba ad portas de caer al mar, no se pierda, pero también protegerán lotes vecinos”, señaló Palacio.
Simultáneamente, se ejecutarán otras adecuaciones en los 110.000 metros cuadrados que tiene el predio. Juan Manuel Valdés, secretario de Productividad y Competitividad de Antioquia, comentó que en diciembre tendrá que quedar lista la primera etapa del ecoparque.
“Tendrá senderos, aula ambiental, cambiaremos la zona de baños, entre otras cosas. Pero tampoco se trata de que sea un gran complejo turístico que irrumpa con el entorno, sino que tenga construcciones bioclimáticas que terminen mezclándose con la naturaleza”, anotó.
El proyecto, además de lo mencionado por el secretario, también contará con zonas de acceso y señalización turística del entorno, bulevar gastronómico, spa, juegos infantiles, salón de reuniones y zona de parqueaderos.
Por otro lado, de la mano del Sena, la Gobernación adelanta un proceso de formación y certificación en competencias laborales con los prestadores de servicios turísticos de Arboletes.
Incluso, agregó Valdés, a través del Banco de la Gente hay un fondo de $20.000 millones (que se moverá según la demanda) para fomentar emprendimientos y que la gente pueda acceder a créditos hasta de 25 salarios mínimos con tasas de interés inferiores a las del sector financiero.
Un volcán con potencial
El turismo asociado a este lugar beneficia, directa o indirectamente, a 2.000 familias de la región que perciben ingresos por hotelería, restaurantes u otros servicios recreativos.
El gobernador Luis Pérez Gutiérrez inclusive dotó de mística al volcán al expresar, quien sabe si a modo de charla o porque lo cree de verdad, que “un baño de lodo rejuvenece hasta cinco años”.
Más allá de las propiedades curativas que le atribuyen a este sitio, el mandatario también destacó la importancia que tiene como un símbolo natural que estaba en manos de particulares, por lo cual celebró que Antioquia lo recupere para todos sus habitantes y que ahora se convertirá en un referente internacional.
Por su parte, el alcalde de Arboletes, Lorenzo II Acuña Romero, agradeció en nombre de la comunidad por la intervención de la Gobernación, pues no solo potenciarán el lugar sino que mitigarán el fenómeno erosivo que amenaza la costa de toda la localidad.
“Con las adecuaciones el volcán no tendrá nada que envidiarle a otros destinos turísticos del departamento y del país”, manifestó. Acuña confía en que el proyecto traerá desarrollo para el municipio .