Aunque se entiende que la competitividad es un asunto de las empresas y las regiones, en Colombia las políticas de desarrollo se abordan con un carácter muy general. Los gobiernos no han abordado el tema de la competitividad desde las regiones, que es donde realmente se compite.
Apenas ahora, el gobierno del presidente Santos empieza a reconocerlo, bajo un principio del desarrollo que es: “trate distinto lo que es distinto”.
En este sentido, el Consejo Privado de Competitividad elaboró una propuesta para una política de desarrollo productivo en la cual se establece la diferencia entre las políticas generales y horizontales y las políticas específicas regionales o verticales.
Lo que el país requiere es trabajar en ambos frentes simultáneamente. Y entender que cada región tiene potencialidades distintas. Parte del problema es que desde los ministerios se han establecido estrategias generales como si todas fueran iguales.
El gran avance tiene que ver con ese planteamiento de cómo regionalizar las políticas de desarrollo productivo.
Esto hace parte formal de la agenda del Consejo de Competitividad de Colombia que preside el jefe del Estado con sus ministros. Y hay que reconocer que tanto el sector público como el privado tienen plena coincidencia para avanzar en este frente, impulsando la competitividad desde las diferentes regiones del país.
Regístrate al newsletter