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Hoy debería escribir sobre la batalla de Chorros Blancos librada por el General José María Córdova y sobre la serie que TeleAntioquia empezó a difundir desde el martes pasado. Lo haré después, Dios mediante. Pero debo ocuparme de otro tema por respeto a mis lectores.
Decíamos el Día del Periodista, en esta misma columna, que tanto los medios como los columnistas, debemos autocensurarnos. Y esa es la ventaja que tenemos los que opinamos en los impresos, pues podemos releernos y corregir, antes de enviar nuestro aporte a la editorial para su impresión; lo que no pueden hacer los periodistas de radio o televisión, por lo inmediato de su trabajo.
Pues bien, por entrar en la moda de las redes, caí en la tentación de opinar en Twitter, donde no siempre se hace el ejercicio de autocensura, si no que se opina y se publica, y cuando uno es tan primario, mete la pata muy fácil. Por la red dije algo que molestó a la señora Ana Cristina Restrepo, quien utilizó la columna que El Colombiano le publica los miércoles, para tratar un tema que se originó en la red de Twitter y ahí se debió quedar.
La columnista de marras titula su columna “Defender las audiencias”, pero se defiende ella misma de un insulto por las redes, mal titulada y en lugar equivocado.
En su columna me critica –por alusiones, citando frases de alguna columna mía– porque he defendido al gremio de finqueros y ganaderos. Lo he hecho, efectivamente, y lo seguiré haciendo. Son ciudadanos colombianos que tienen los mismos derechos de los demás. A lo mejor la columnista considera que los finqueros y ganaderos no hacen parte de las audiencias, por pensar distinto a ella. Pero de las audiencias hacen parte quienes comparten sus posiciones y quienes discrepan de ellas.
Cambiar palabras en una cita se puede hacer por ignorancia o por maldad. Yo no hablé de “rectificación”, sino de retractación. Yo me retracté de lo dicho y expliqué el motivo, obligado por ella, ya que lo dicho por mí en la red, lo publicó en su columna pero cambiando una palabra. Lo copio aquí, textual como lo dije:
“@anacrisrestrepo tiene razón. Ella no es activista política de la guerrilla. Incurrí en un error, me retracto como ella solicitó. Quise decir que sus críticas permanentes a Uribe y la Iglesia Católica, llenas de odio, alientan la lucha de clases y el accionar guerrillero. @tamayo_g”.
Esta fue mi retractación. La hice por respeto a su persona y a su buen nombre, no como un esguince a la ley. Así se trató y difundió por la red y ahí debió quedar. Lo hago aquí por respeto a usted, lector.
Todas las personas que por centenares me solicitan entrar a mi Twitter, no pierdan el tiempo que voy de salida. No peleo en el fango.
ÑAPA: El derroche de papel en las facturas de prediales del Municipio de Medellín es exagerado. La cuenta que venía unificada, ahora llega en seis o siete folios. Separando garajes, útiles, apartamentos y tumbas de Campos de Paz. ¿Así estamos de ricos, Federico? ¿Y del medio ambiente qué?.