Una historia, similar a la ocurrida en la piscina del Hotel Hilton, de Cartagena el 18 de enero de 2007, donde murió un niño succionado por el tubo de la piscina, se registró en Tarazá, donde la víctima fue un menor de 14 años de edad.
A Marlon Stiven del Castillo Arango, de 14 años, lo succionó uno de los tres tubos de una de las piscinas de la finca del alcalde de la localidad, ubicada en el sitio El Telo.
Patricia, su madre, relató que al predio de recreo llegaron varios muchachos, que llenaron la piscina, que está en construcción, y empezaron a bañarse y su hijo los acompañó. Entonces, el oficial de la obra le recomendó a Marlon que cuando acabaran le quitara una tabla que hacía las veces de tapa de tres tubos de succión.
Cuando se acabaron de bañar, a Marlon se le olvidó la diligencia y se fue para el pueblo. Allí se encontró con el contratista quien le preguntó si había destapado la piscina.
El muchacho le dijo que no se había acordado a lo que el constructor le recordó que si se perdían los bultos de cemento que tenía en el lugar era por su culpa.
En la noche el muchacho contrató un mototaxista para que lo llevara rápido a la piscina y destapar los desagües.
"Como no había luz el conductor iluminó el sitio con la moto y Marlon se tiró. Ya la piscina, estaba llena. Fue a quitar la tabla y uno de los tres tubos se lo tragó. Luego la Policía debió utilizar cuerdas para sacar el cadáver del tubo. EL COLOMBIANO trató de hablar con el alcalde de Tarazá pero su celular estaba en correo de voz.
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