De acuerdo con los resultados comparados de la Encuesta de Percepción Ciudadana 2013, que realiza Ipsos Napoleón Franco, Medellín sobresalió en la mayoría de los ítems frente a las otras ciudades y por tercera vez consecutiva resultó ser la de mejor calidad de vida, con importantes retos por superar.
En Medellín se encuestan 1.522 personas, de las trece mil encuestas que recogen la opinión de los ciudadanos sobre la gestión que realizan las administraciones para mejorar la calidad de vida de los habitantes de Bogotá, Medellín, Cali, Cartagena, Barranquilla, Valledupar, Bucaramanga y su área metropolitana, Ibagué, Pereira, Yumbo y Manizales.
Tradicionalmente, los habitantes de Medellín se han sentido muy satisfechos de la ciudad como un buen lugar para vivir y en 2013 la proporción fue del 85 por ciento. No perciben la movilidad como un problema y expresan la más alta satisfacción con el estado de las vías y su sistema de transporte.
También valoran muy positivamente la atención en salud, la educación y la prestación de los servicios públicos, pero están al final de la medición en lo que tiene que ver con las prácticas deportivas y recreativas.
La seguridad es quizás el tema que más valoran los colombianos en términos de calidad de vida y los resultados de la encuesta de la Red cómo vamos muestran que "la situación se mantiene prácticamente igual" en los últimos tres años. Cerca de cuatro personas de cada 10 se sienten seguras en las ciudades. En Medellín, la gente se siente segura en su barrio, no así en la ciudad, y es indudable que la reducción en el índice de homicidios no ha calado como mensaje que mejore esa percepción.
La seguridad, la gestión ambiental y mejorar en el uso del tiempo libre de la gente, mediante el uso masivo de espacios recreativos y culturales son algunos de los retos que enfrenta la ciudad. Pero sin duda, su gran lunar tiene que ver con la desigualdad social y la situación económica. La lucha contra la pobreza debe ser para esta y las futuras administraciones una prioridad. Hoy sus habitantes no sienten que estén mejorando y en el ranquin que mide la situación económica de los hogares figuramos en el penúltimo lugar. El último lo tiene Bucaramanga. La mejoría más notable la perciben los habitantes de Yumbo y Barranquilla.
Y esta es una labor que les compete tanto a los administradores de la ciudad, como a su pujante sector privado y a los mismos ciudadanos que tienen que adquirir mayor conciencia sobre sus propias responsabilidades frente al medio ambiente, al civismo, el espacio público, la movilidad y la población más vulnerable.
Los resultados de esta encuesta, sumados a los indicadores objetivos que aporta el programa Medellín cómo vamos envían claros mensajes en torno al devenir de la ciudad para hacer de ella un mejor territorio, equitativo y sostenible.
¿Y cuál sería entonces esa mejor ciudad para la vida? La Red cómo vamos recomienda una donde el presupuesto sea bien invertido, mediante una eficiente gestión de Alcaldía y Concejo, donde la gente además de sentirse orgullosa se comporte bien, esté segura, cuente con los servicios públicos esenciales, pueda movilizarse en buenas condiciones y tenga una buena cobertura en educación y salud.
EL GRAN DESAFÍO ES GENERAR MAYORES OPORTUNIDADES DE EMPLEO FORMAL
Por PIEDAD PATRICIA RESTREPO
Coordinadora de Medellín cómo vamos
Esta no es una encuesta que toma a mil ciudadanos y los lleva a vivir un tiempo a las once ciudades y luego les dice: vengan me cuentan cuál es la mejor ciudad para vivir. Tampoco es con indicadores de carácter objetivo y que se elabore un índice y que en ese índice Medellín salió de primero. No. Es una encuesta de percepción de la ciudadanía sobre condiciones de calidad de vida en su ciudad.
Lo que hace la Red de cómo vamos es comparar ese pensamiento en cada ciudad a partir de una metodología de correlación con todos esos indicadores que se incluyen y mirar cuál es la que tiene la mejor percepción sobre calidad de vida. En ese contexto es que se dan los resultados de esta encuesta.
Durante los últimos tres años, Medellín ha ocupado el primer lugar. Hay unos ítems en los que resulta mejor evaluada, pero las calificaciones que tienen que ver con medio ambiente son bastante bajas y no está bien evaluada en responsabilidad ciudadana.
Esta es una foto en un año, para varias ciudades y aunque hay aspectos en los cuales Medellín sale mal calificada, a otras ciudades les va peor. O sea, a Medellín le va mucho mejor que a otras ciudades en esos mismos aspectos.
Desde los indicadores objetivos y de la encuesta de percepción, la foto hoy nos muestra que Medellín tiene un gran reto de ciudad en generar nuevas oportunidades de empleo formal. Hemos avanzado, pero a un ritmo lento en términos de equidad y ese es un desafío para una ciudad que se dice democrática, próspera, innovadora, sostenible.
