La cuarta jornada del paro del transporte por carretera en España comenzó este jueves con la circulación en todas las principales vías "plenamente normalizada", según el Ministerio español del Interior.
Sin embargo, los efectos del paro se dejan sentir en algunas fábricas, especialmente de automóviles, que tuvieron que parar su actividad por falta de suministros.
El Ministerio del Interior informó en un comunicado que los puestos fronterizos permanecen abiertos, al igual que los accesos a las grandes ciudades.
La misma fuente también dio cuenta de que 71 personas fueron detenidas desde el comienzo de la huelga, el pasado lunes, hasta primera hora de hoy.
Más de 6.000 camiones circulan escoltados por las Fuerzas de Seguridad para garantizar el funcionamiento de los servicios públicos y el abastecimiento de los mercados tras los bloqueos de carreteras y los incidentes causados en días anteriores por los piquetes.
Parálisis en grandes fábricas
Los efectos del paro se dejan sentir este jueves, además de en los mercados, en algunas factorías de automóviles a las que no han llegado los suministros.
Este es el caso de las de Renault en Valladolid y Palencia, en el centro de España, que este jueves pararon su actividad laboral, lo que afecta a miles de trabajadores.
La factoría Ford de Almussafes, en Valencia (este), seguirá paralizada todo el día después de que el miércoles en la noche ya se dejara de trabajar por la falta de componentes para las plantas de carrocería, montaje y pintura.
Por el contrario, Seat empezó a recibir algunos suministros gracias al desbloqueo del paso fronterizo y trabaja al 40 por ciento de su capacidad en la fábrica de Martorell (Barcelona), y al 50 por ciento en la de la Zona Franca de Barcelona.
El centro de PSA Peugeot Citroen en la ciudad gallega de Vigo paralizó también hoy toda su producción de vehículos.
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, dijo, tras el acuerdo alcanzado con la mayoría del Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC), que ahora es éste organismo el que tiene que llamar a los convocantes de la huelga para que desistan "de esa posición de fuerza".
La pasada noche, el Ministerio de Fomento firmó un acuerdo con asociaciones que representan el 88 por ciento del CNTC con mejoras para el colectivo de los transportistas.
El paro pretende forzar al Gobierno a adoptar medidas que contrarresten la carestía del gasóleo debido a los altos precios del petróleo.
