Que las crisis son oportunidades es lo que todos los días predican los empresarios y académicos. Pero en Industrias Haceb esta es una lección muy aprendida que ponen en práctica todos los días.
No de otra manera se explica que en medio de la desaceleración económica y de la caída de sus principales mercados -Ecuador y Venezuela- y mientras otras compañías han congelado sus planes de inversión, se haya comprometido en un proyecto tan ambicioso como la construcción de una planta.
A finales de este año debe estar lista la nueva planta de neveras (con una capacidad que llegará en el corto plazo a 3.000 unidades por día), que ocupa un área de 18.000 metros cuadrados y en cuya construcción, acondicionamiento y montaje de maquinaria se invierten, en plena crisis, 20 millones de dólares, es decir, unos 40.000 millones de pesos.
La meta de la empresa, dice su gerente General, Darío Valencia Echeverri, es ponerla a funcionar en los primeros días de 2010 (cuando celebrará los primeros 70 años), con la idea de sacar la primera producción de neveras en abril, para ampliar la oferta especial para el Día de la Madre.
"Uno hace la tacada y no sabe si le va a salir la carambola", dice el empresario, pero sí sabe que va a producir neveras con tecnología de última generación, productos más eficientes en el uso de energía y de alta exigencia ambiental y con estándares mundiales de competitividad.
Todo el complejo de Haceb en Copacabana ocupa un área de 220.000 metros cuadrados, de los cuales tiene construidos 180.000 metros, incluyendo las plantas de refrigeración y calefacción, las oficinas y bodegas y las instalaciones de Electrocontrol, empresa filial que fabrica productos para iluminación.
Con su trato amable y cercano con todos empleados, el gerente de Haceb, con 38 años en la compañía, 20 de ellos en este cargo, se ha ganado el cariño y el respeto de sus 2.500 compañeros de trabajo quienes lo llaman, simplemente, "Don Darío".
Y con la misma sencillez, define, con un símil, la situación que vive la compañía en esta coyuntura: "Lo más importante es pasar la turbulencia con Venezuela y Ecuador, afectando lo mínimo posible a la nave, a los pasajeros y a la tripulación".
Ante la caída de sus mercados vecinos, donde cuenta con sus propias comercializadoras (Industrias Haceb de Venezuela e Industrias Haceb de Ecuador, similares a la compañía que opera en México), la producción y las exportaciones se han reducido en un 50 por ciento pero, aún así, le hace frente a la 'turbulencia' con varias medidas.
Nueva filial en Perú
Una de ellas, la apertura de nuevos mercados: acaba de crear una nueva filial, Industrias Haceb de Perú, para ampliar la comercialización de sus productos en este mercado. De los 20 millones de dólares que planea exportar en 2009 a 11 países (entre ellos, Honduras, Puerto Rico, México, Panamá, Bolivia y Trinidad y Tobago), unos dos millones provendrían de las ventas en Perú, es decir, 4.000 millones de pesos.
"Somos muy optimistas con el comportamiento de las ventas en ese segundo semestre", dice Valencia, al estimar que las ventas totales llegarían en este año a 380 mil millones de pesos, con leve reducción frente a 393,388 millones de pesos en el 2008.
El mercado nacional demanda unas 800.000 neveras por año, de las cuales unas 250.000 son fabricadas por esta empresa con las marcas Haceb e Icasa y exporta unas 50.000 unidades por año a varios mercados.
La otra estrategia es el esfuerzo permanente en el mercado nacional, con sus marcas y su gama de productos, para mantener estable la producción y las ventas locales.
Y, entonces ¿qué va a hacer con la actual planta de refrigeración?
Esta es otra de las estrategias que Haceb planea para enfrentar la coyuntura del mercado.
Los 20.000 metros cuadrados que hoy ocupa la planta de refrigeración los podría utilizar para el desarrollo de nuevos productos, entre ellos, por ejemplo, la línea de refrigeración comercial (neveras y botelleros para bares, tiendas y restaurantes), en la cual ya ha tenido algunas experiencias muy exitosas, en el mercado nacional y en el exterior.
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