El Milán recuperó la autoestima con una contundente victoria (4-1) ante el Juventus, que además del encuentro perdió al central internacional Giorgio Chiellini, que debió abandonar en camilla el césped de San Siro, aquejado de una lesión de rodilla.
Tras las derrotas sufridas por los "rossoneri" ante el Sevilla (1-0), Chelsea (5-0) y Manchester City (1-0), el conjunto de Carlo Ancelotti necesitaba un triunfo de prestigio para resarcirse de una gris pretemporada.
Y para ello, qué mejor que el Juventus, en una nueva reedición del derbi de Italia, enmarcado en esta ocasión en el trofeo Luigi Berlusconi, que se quedó en la vitrinas rojinegras tras el contundente 4-1.
Un resultado que hubiera podido ser bien distinto si el colegiado del encuentro no hubiera anulado a los dieciocho minutos un gol al brasileño del Juventus Amauri por supuesto fuera de juego.
Polémica decisión que se vio agravada dos minutos más tarde con el gol del checo Marek Jankulovski, que abrió el marcador para el Milán (1-0) a los veinte minutos con un certero remate ante el que nada pudo hacer el portero juventino Antonio Chimenti.
Un gol que pareció descentrar por completo a los de Claudio Ranieri, que tan sólo cinco minutos después encajaron el 2-0 tras un cabezazo de Massimo Ambrosini en el área pequeña a centro del holandés Clarence Seedorf.
No obstante, la peor noticia para el Juventus, que el pasado miércoles dejó prácticamente sellada su presencia en la Liga de Campeones tras derrotar 4-0 al Artmedia eslovaco, llegó con la lesión (m.32) de Giorgio Chiellini que debió abandonar el terreno de juego en camilla con una lesión en la rodilla.
Circunstancia que no apiadó al Milán, que a los seis minutos del segundo tiempo, estableció el 3-0 por medio de Filippo Inzaghi, que reapareció tras el descanso, una vez superadas las molestias que habían lastrado al delantero en los últimas semanas.
El gol del joven Cristian Pasquato, a los setenta minutos, pareció maquillar la derrota para la Juventus, pero el Milán quería compensar a su afición por los últimos malos resultados y Ambrosini, nueve minutos después, volvió a abrir la brecha en el marcador con el cuarto y definitivo tanto (4-1).
