La calle, escenario de derechos y oposición

La capacidad de convocatoria de estudiantes y el apoyo político, factores claves.

Entre noviembre y diciembre del año pasado, los estudiantes marcharon ocho veces en el país. FOTO Santiago mesa rico

Richard Aguirre Fernández

17 de enero de 2019

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Tal cual cerró 2018, el inicio del año se ha visto marcado por movilizaciones y, vale la pena decirlo, este puede ser el común denominador.

De fondo, se han mezclado varios factores. El primero es que por esta vía se han logrado las solicitudes. El segundo es que el gobierno del presidente Iván Duque tiene como antagonista una oposición beligerante cuya vía, más allá del control político habitual en el Congreso, está en las calles.

Así sucede y así lo reconocen los analistas. Tanto la protesta estudiantil, como la reciente movilización contra el fiscal Néstor Humberto Martínez pidiendo su renuncia, han tenido, además del respaldo y convocatoria ciudadana, el activo apoyo de dirigentes como los congresistas Gustavo Petro, Jorge Enrique Robledo, Ángela Robledo y el partido de la Farc.

Los casos

Hoy estos dos sectores vuelven a salir. Los estudiantes a reclamar que el Gobierno cumpla lo acordado el 14 de diciembre y a exigir el fin del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), de la Policía, por considerar que hay abuso en el uso de la fuerza.

Alex Flórez, representante y vocero de los estudiantes, manifestó que la idea es rechazar “los excesos que han cometido en las movilizaciones sociales”, al considerar que el Gobierno “incumple tratados internacionales que obligan a que ese tipo de fuerzas sea la última reacción”.

El segundo tema tiene que ver con el fiscal Martínez. La semana pasada, con plantones, algunos ciudadanos exigieron su renuncia, al señalar un supuesto conflicto de intereses entre su cargo actual y el que desempeñó como asesor para la Ruta del Sol, relacionada con un caso de corrupción la multinacional brasileña Odebrecht.

Al respecto, el expresidente de la Corte Suprema de Justicia Jaime Arrubla expresó que estas manifestaciones han ganado espacio con las redes sociales. Sobre la solicitud ciudadana señaló que su periodo es de cuatro años y debe cumplirlo, sin atender a presiones. Sin embargo, agregó que “solo él sabrá cuándo le llega el agua al cuello”.

Habrá más protestas

De acuerdo con Juan Camilo Arroyave, docente de Ciencia Política de la Universidad Autónoma de Manizales, el año tendrá manifestaciones sociales recurrentes por la coyuntura política y electoral. Para el analista, “tenemos que mirar cómo se legitimaron, producto de avances en materia social y política”.

Asegura Arroyave que el reto es trascender: que los movimientos sociales, que reivindican sus derechos, logren acciones concretas y las garantías por parte del Gobierno.