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Las fracturas internas del partido Alianza Verde provocaron que la posibilidad de que esa colectividad tuviera un candidato presidencial propio se desvaneciera en el aire. Después de una reunión que duró ocho horas, se resolvió que los militantes del partido podrán apoyar al candidato presidencial que prefieran, con absoluta libertad.
Esta solución se dio durante una reunión de la Dirección Nacional de los verdes, a la cual acudieron los tres copresidentes de la colectividad, el ejecutivo nacional, algunos congresistas y varios líderes políticos regionales.
La libertad era uno de los tres caminos que tenía el partido de cara al 2022. De un lado, senadores como Angélica Lozano y Antonio Sanguino estaban apoyando ir a consulta con la Coalición de la Esperanza, donde están Sergio Fajardo, Humberto de la Calle, Juan Fernando Cristo, Juan Manuel Galán y Jorge Robledo.
Por su parte, congresistas como Inti Asprilla y Katherine Miranda querían unirse con Gustavo Petro, Roy Barreras, Francia Márquez y las colectividades de izquierda que componen el Pacto Histórico.
Con la opción de dejar en libertad a sus militantes, los ganadores son el sector afín al Pacto Histórico y, por añadidura, Petro. Una encuesta del Centro Nacional de Consultoría mostró que los verdes estaban más dispuestos a unirse con la Coalición de la Esperanza (53 %) que con el Pacto Histórico (37 %); por eso, el mejor escenario para los que son más cercanos a Petro era, precisamente, que les dieran libertad para apostar por su coalición.
Entretanto, con esta decisión de la Dirección Nacional, la representante a la Cámara Juanita Goebertus podrá apoyar a Alejandro Gaviria sin ningún tipo de presiones. Gaviria, por su parte, reaccionó a la decisión de los verdes y los invitó a apoyarlo. “El partido verde podrá acompañar un propósito de unidad amplio y es clave para consolidar el centro político”, aseguró.
En el aire quedaron las precandidaturas del exgobernador de Boyacá, Carlos Amaya, y la senadora Sandra Ortiz, quienes no contarían con el apoyo irrestricto de sus copartidarios. Por su parte, el exgobernador de Nariño, Camilo Romero, señaló que seguiría adelante con su precandidatura, pero es probable que se una al Pacto Histórico.
El camino hacia el Senado
Para las legislativas se definió que la Alianza Verde lanzará sus listas al Senado de la República de la mano de la Coalición de la Esperanza. Esta decisión, sin embargo, es vista con recelo por algunos sectores del partido, pues señalan que se tomó de forma tardía.
”La discusión se centra en el papel que tiene el Nuevo Liberalismo dentro de la Coalición de la Esperanza, que podría estar por encima de la Alianza Verde”, le dijo a EL COLOMBIANO una fuente de los verdes que prefirió mantener su nombre en el anonimato.