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La reapertura de la vía a Urabá sigue siendo incierta e incluso en las últimas horas se complicó más debido a que en el mismo sitio del deslizamiento de tierra del jueves y que bloqueó el paso, se presentó una nueva caída de materiales.
Según el reporte de Autopistas Urabá, responsable de la vía y que ejecuta el proyecto Autopista al Mar 2, hacia el mediodía del lunes festivo, cuando se realizaban labores de remoción de la tierra, de la montaña cayó más material y los trabajos pararon.
“Por seguridad de nuestros trabajadores se suspenden las actividades de remoción en este punto. No se tiene fecha de apertura”, publicó el concesionario en sus redes sociales.
Recordemos que el sitio del derrumbe se conoce como Peñas Blancas, en el kilómetro 26, entre Uramita y Dabeiba. Entre ambas localidades hay una vía alterna llamada El Revenidero, un tramo sin pavimentar de más de 30 kilómetros que lleva varios años en desuso y se estudia la posibilidad de habilitarlo.
Mientras tanto, los viajeros entre Urabá y Medellín deberán utilizar el trayecto Medellín - Caucasia - Montería - Planeta Rica - Arboletes - Apartadó, que alarga el tiempo de viaje de ocho horas a más de 15, según cálculos del gremio transportador.
Según Anderson Quiceno, director ejecutivo de la Asociación de Transportadores de Carga (ATC), este trayecto alterno ha implicado un aumento de 100 a 400 kilómetros más en los recorridos.
“Se ha hecho mucho más complicada toda la movilidad y el tráfico para el transporte de mercancías y de bienes, porque toda la carga de tráfico que había sobre la vía hacia el Urabá se traslada al otro corredor por Caucasia”, expresó.
Asimismo, Quiceno afirmó que, debido a este cierre, el gremio transportador ha tenido pérdidas entre $300 y $400 millones diarios.
“Este dinero está representado tanto en pérdidas como en sobrecostos logísticos que se tienen que dar para poder llevar a buen término las mercancías, debido al aumento de los recorridos. Hay muchos insumos que, al haber más kilometraje, tienen un alto consumo, como los combustibles, aceites, llantas. También se afecta la calidad de vida de los conductores porque estos tienen que exceder más las horas de trabajo y tienen que buscar mucho más descanso y alimentación”, afirmó.
Por su parte, desde Colfecar, el gremio que agrupa los transportadores de carga, explicaron que un tractocamión que viaja entre Medellín y Turbo, le tomaba cerca de 13 horas recorrer los 342 kilómetros por la Autopista al mar 2. “Ahora este recorrido ha aumentado en cerca de 20 horas puesto que hay que tomar la vía alterna por Caucasia y Planeta Rica en Córdoba, cuya distancia es de 591 kilómetros”.
Agregaron que esto implica un aumento en el combustible de cerca del 70 %, y en los peajes de 79%, puesto pasan de ser 2 estaciones de peaje a 8 por la vía alterna.
Además, indicó Colfecar, las anteriores condiciones implican una reducción en la cantidad de recorridos mensuales que puede realizar un transportador en este trayecto, lo que conlleva a una menor disponibilidad de vehículos para las empresas de transporte