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Pasaron más de 112 horas en el Valle de Aburrá para que la violencia se llevara una vida. Una riña familiar le costó la vida a Jarol Daián Restrepo Rúa, de 31 años, quien fue apuñalado y dejado en el Hospital San Vicente de Paúl, de Caldas.
El ataque se registró en la mañana del pasado lunes en un barrio de este municipio del sur metropolitano. Según las autoridades, habría sido agredido en su residencia. Fue trasladado en un vehículo particular.
Debido a la gravedad de sus lesiones, fue trasladado al Hospital Manuel Uribe Ángel, de Envigado, donde falleció en la tarde de hoy, martes, luego de ser intervenido quirúrgicamente. Las autoridades andan tras la pista del responsable.
Antes de este homicidio, la última muerte violenta en todo el área metropolitana fue la de Darwin Alexis Buriticá Quintero, de 17 años, quien falleció en un procedimiento policial ocurrido en la noche del pasado jueves en el barrio Doce de Octubre, noroccidente de Medellín.
En medio de esta racha sin asesinatos, el comandante de la Policía Metropolitana, general Javier Josué Martín, destacó que “la semana 14 fue muy positiva, porque solo hubo dos homicidios en los siete días. También hubo una reducción hasta en el tema de las lesiones personales”.
Según los registros de la Policía Metropolitana, este año se han registrado 134 homicidios en todo el Valle de Aburrá, de los cuales nueve se han producido en el municipio de Caldas. En el 2021 se contabilizaban 147 casos en los 10 municipios de la región.