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El sueño de un sistema integrado de transporte en el occidente de Medellín no se interrumpirá con la decisión del gobierno de Juan Manuel Santos de no entregar los $80.000 millones prometidos para la construcción del metrocable Picacho.
A pesar de la insistencia de la Alcaldía para que se hiciera efectivo el desembolso, EL COLOMBIANO conoció, de fuentes en Casa de Nariño, que no se girará la plata para las obras que avanzan ya en un 25%.
En el cable Picacho la inversión estimada es de $298.000 millones. Según el secretario de Hacienda, Orlando Uribe, la financiación del proyecto se da con $158.000 millones del Fondo Medellín para la Vida y $100.000 millones más que se le adicionaron, con autorización del Concejo, de los recursos que se tenían de Isagén, y que están destinados para el corredor de la 80.
Otra parte de los recursos con los que cuenta la Administración para el cable, $25.000 millones, fueron girados por la Gobernación de Antioquia, de plata que recibió por la venta de Isagén.
“Esperamos que lleguen los $80.000 millones del Gobierno para reponer los $100.000 millones que aprobó el Concejo de Isagén, como es el compromiso, y que no afecte lo dispuesto para el corredor de la 80. Si no nos llegan tendremos que utilizar recursos ordinarios”, dijo Uribe.
Los argumentos para que desde el Gobierno Nacional no se hubieran entregado los recursos para el cable Picacho van en el sentido de un agotamiento del presupuesto y la priorización del financiamiento de otros proyectos.
Son 141 cabinas (tres de ellas quedarán como reserva) las que tendrá el sistema en el noroccidente y que están siendo fabricadas en Francia y llegarán a la capital antioqueña en marzo de 2019. Su costo es de 10.000 millones de pesos.
Con este cable se beneficiarán 420.000 personas y se transportarán, diariamente, 36.000 usuarios. Uno de los hitos principales es la gestión predial y la Alcaldía reporta que se avanza en un 68 %. La empresa Metro hace el apoyo técnico y financiero de la obra.
Tanto el secretario Uribe, como el alcalde Federico Gutiérrez, aguardaban, ayer en la tarde, que el presidente Juan Manuel Santos cumpliera su palabra y girara los recursos para el cable Picacho.
De hecho, el miércoles pasado se hizo pública la carta que el mandatario local le envió al ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, reclamándole la plata.
“El pasado 22 de septiembre de 2017, durante Audiencia Pública de concertación y definición del plan de inversiones para proyectos de infraestructura de impacto regional, en la Gobernación, usted se comprometió con Medellín a que la Nación aportaría recursos para cofinanciar el proyecto de inversión Construcción y puesta en marcha del Metrocable El Picacho”, indicó Gutiérrez en la carta.
El alcalde, no obstante la incertidumbre por los recursos de la Nación, afirmó ayer que necesitan $55.00 millones de la Nación (son $80.000 millones, pero descuenta los $25.000 millones de Isagén que aportó la Gobernación). Aclaró que la realización del proyecto está asegurada y se entregará en el segundo semestre del año entrante. Anotó que siempre hubo un buen ambiente, desde el Gobierno Nacional, para apoyar la obra.
“Le he enviado cartas, le escribo chats (al ministro de Hacienda), diciéndole que antes de que se vayan nos entreguen los $55.000 millones que son necesarios. Ya pusimos la plata, toda completa, desde el año pasado para avanzar en el proyecto. Si nos quedamos esperando no hubiera salido (el proyecto)”, concluyó Gutiérrez.