viernes
7 y 9
7 y 9
Que la voz humana y otros ruidos y sonidos pudieran grabarse y reproducirse, para muchos, en el siglo XIX, era un asunto del demonio... no de la física.
Hoy, cuando se cumplen 120 años de la que se consideró por mucho tiempo la primera grabación de la voz humana, la realizada por Thomas Alva Edison con su flamante fonógrafo, este logro sigue siendo sorprendente.
Edison grabó una estrofa de una canción infantil célebre en Estados Unidos: María tenía un corderito (Mary had a little lamb):
María tenía un corderito,/ corderito, corderito,/ María tenía un corderito,/ cuyo vellón era blanco como la nieve.
Sin embargo, se sabe que hay una grabación de la voz humana anterior a esta: la que consiguió el francés Edouard Leon Scott Martinville en su fonoautógrafo, y que patentó el 25 de marzo de 1857. Este físico también escogió un tema de niños conocido en su país: Au Clair de la Lune (A la luz de la Luna). Se alcanzan a oír tal vez dos versos de la primera estrofa:
A la luz de la luna/ Mi amigo Pierrot/ Préstame tu pluma/ Para escribir una palabra/ Mi vela está muerta/ Ya no tengo fuego/ Abre tu puerta/ Por el amor de Dios.
La diferencia con el fonógrafo de Edison es que el del francés no podía reproducir la grabación. Fue con aquel que se comprendió lo del galo y se oyó lo grabado.
Lo cierto es que a partir de estos inventos comenzó la industria fonográfica.
De acuerdo con Gustavo Escobar Vélez, investigador musical, el sonido en conserva, como se le dice a la grabación, es una maravilla que motivó la búsqueda de tecnologías que hicieran perdurable el material sonoro. Primero en cilindros; después, en discos. Dice que las primeras disqueras fueron la Columbia y la Victor Talking Machin.
Los empresarios de espectáculos se quejaron en su momento: disminuyó la cantidad de personas que asistían a los conciertos, porque tenían los cilindros o discos en la casa.
La conservación de la voz humana fue el inicio de la historia sonora en la que quedan grabados discursos significativos. Registros alegres y trágicos que permanecen fácilmente en la memoria de las personas y los pueblos.