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El Fondo Monetario Internacional (FMI) actualizó sus perspectivas de crecimiento económico para 2018 y 2019. Las tensiones políticas y la guerra comercial han sido fundamentales para replantear lo que pueda ocurrir con el crecimiento de los países, sobre todo en los emergentes y América Latina.
Con ese panorama, el FMI, para el caso de América Latina y el Caribe, redujo las expectativas que había expuesto en abril de este año (2 %) a 1,6 %.
Son tres las razones en las que el organismo sustenta su proyección: constricción de condiciones financieras; el ajuste político de la región; y las tensiones comerciales por la disputa de Estados Unidos - China y su efecto sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, complican el escenario.
Las proyecciones de la región están muy por debajo del 3,9 % que tiene previsto el FMI a nivel mundial.
“Las transiciones políticas que vivirá América Latina en los próximos meses agudizan la incertidumbre. Aunque los peligros geopolíticos parecen estar en remisión, los factores que los impulsan aún están en juego en muchos casos”, aseguró Maurice Obstfeld, consejero económico y director del Departamento de Estudios del Fondo Monetario Internacional, lo dijo a través del informe publicado ayer.
El FMI explica que México es uno de los casos más relevantes en ese sentido por la reciente elección de Manuel López Obrador, candidato de izquierda, sobre el que ha surgido la incertidumbre de cuál podría ser el vuelco económico que tenga la nación norteamericana.
Las proyecciones más recientes hechas por el FMI (datan de abril) y daban cuenta de que Colombia crecería 2,7 % cuando se terminara 2018.
La cifra fue confirmada tras la visita que el comité técnico de la organización financiera hizo al país en marzo de este año. Para ese entonces la conclusión se centró en mostrar cómo una reforma pensional, la reducción de costos en las exportaciones y el crecimiento en recaudo fiscal podrían ayudar a que Colombia tuviera un crecimiento que superara la media de la región.
“El cambio económico asociado al movimiento político que pueda tener el país con la llegada de Iván Duque no supone un problema en sí para el FMI. Sus iniciativas económicas parecen ser ortodoxas”, aseguró Alejandro Torres, profesor de economía en la Universidad Eafit.
Las oportunidades del país, según lo expresó el Fondo Monetario Internacional a través del informe “Perspectivas Económicas Mundiales”, están para que Colombia, y las naciones del continente que sustentan parte de su economía en la exportación de materias primas, sigan produciendo de manera eficiente para que parte del ingreso que reciben por este tipo de actividad se incremente de manera considerable en lo que resta del año.
El papel que juegue, por ejemplo, el precio del barril de petróleo será fundamental para las cuentas que haga el país en los próximos meses. En este apartado las proyecciones resaltan el hecho de que precios de materias primas como el petróleo hubieran aumentado 16 % entre febrero y junio de este año.