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Lejos de mejorar, el panorama de los presos políticos en Venezuela sigue empeorando. Según el informe trimestral del Foro Penal Venezolano, 164 personas fueron arrestadas arbitrariamente en el país entre enero y marzo de 2018, para llegar a un total de 234 encarcelados por ser oposición al gobierno.
De los indicadores presentados, sin duda el que más dudas levanta es el de los 40 miembros de la fuerza pública venezolana que fueron detenidos en lo que va del año por motivos de conciencia u oposición al régimen madurista, con lo que serían un total de 70 militares privados de la libertad por ello.
Aunque las fuerzas armadas habían sido el principal sostén de Hugo Chávez y posteriormente de Maduro para mantener su gobernabilidad, la grave crisis social y económica que vive Venezuela desde 2015 habría debilitado este mando, especialmente en sus bases. Este inconformismo alcanzó visibilidad mundial por la sublevación protagonizada por el policía Óscar Pérez y su grupo, que fueron asesinados en un operativo en enero de este año.
Inclusive, las cifras presentadas por el Foro Penal Venezolano, una organización no gubernamental que existe hace 15 años en el país vecino, son más mesuradas que las esgrimidas a mediados de esta semana por el opositor y expresidente de la Asamblea Nacional, Julio Borges, que asegura que son en realidad 200 los oficiales presos y detenidos porque se han rebelado.
Justamente este jueves se conoció que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) habría hecho firmar a sus hombres una “Proclama de Reafirmación de Lealtad y Compromiso de la FANB a Maduro”, una iniciativa liderada por el general en jefe de esta fuerza Vladimir Padrino López, probablemente el oficial con mayor poder en ese país.
Para John Marulanda, consultor internacional en seguridad y defensa, más allá de que esta carta de lealtad es una “demostración clara de la crisis del país, con un resquebrajamiento en las fuerzas militares”, no considera que Venezuela esté cerca a un Golpe de Estado militar.
“Si dan un golpe, agarran un país endeudado y comprometido con China. Dentro de los militares, la figura superior es Padrino López, que encarna el poder real de Venezuela, pero él está casado con el estado de las cosas en Venezuela”.
Recalca que de haber ánimo de insurrección, debería ser protagonizado por los coroneles, aunque hasta ahora han sido los mandos menores, como los capitanes, los que han manifestado mayores molestias. “Eso pasa porque ellos mismos están siendo afectados por la crisis económica. A eso se agrega que la delincuencia en el país está disparada y los colectivos son entidades paramilitares que les disputan el poder”.