Somos mucho más que narcos

El paisa se cansó de los estereotipos que crean las series sobre el país. Actúa en una campaña que los combate.

Aldemar Correa es el protagonista de la nueva serie juvenil de Teleantioquia: Tu Club. Interpreta al profe Alejandro.

FOTO santiago mesa

AMarlon Cruz se le perdió Reina entre las calles de Nueva York, se esfumó al igual que su sueño americano. Su búsqueda, inútil, es quizás el papel más recordado de Aldemar Correa, en la cinta Paraíso Travel de Simón Brand.

Eso fue hace 10 años y ahora actor y director vuelven a trabajar juntos en la campaña Colombian Ambush (Emboscada colombiana), de la agencia Dieste, a la que también se sumó EL COLOMBIANO. Su objetivo es cambiar la imagen negativa que se tiene del país afuera.

En uno de los videos usted parece ser un sicario buscando a otro, en fuga, pero no. ¿Cuál fue el reto
actoral?

“Lo más difícil es crear una atmósfera que reúne los estereotipos del universo del narcotráfico y darle un giro. Al final lo que sienten estos personajes es admiración por una especie de ave, una de las 1.900 que hay en Colombia: el piranga leucoptera. Resulta que son observadores de pájaros y no delincuentes. Sí, la asociación con ese universo está en la mente de los espectadores, de cierta forma contaminada, por ese mundo que ha hecho famoso la industria del entretenimiento. La gente juzga a priori a cualquier concepto”.

Sería mejor entonces abordar en la ficción otros temas.

“Como colombianos es imposible dejar de hablar del narcotráfico, así como para los alemanes es inadmisible dejar de hablar de Hitler y su holocausto nazi. En esta campaña no nos estamos refiriendo a episodios de la historia del país como lo hicimos con Narcos o con Escobar, el patrón del mal, en las que actué. Es algo que sucedió y no lo podemos negar, no podemos tapar el sol con un dedo, pero en este caso estamos usando el estereotipo para combatir ese encasillamiento en el que nos tienen”.

¿De qué forma se ha sentido catalogado en alguno de los clichés que combate la campaña?

“En los aeropuertos he sido víctima de exhaustivas requisas cuando ven que mi pasaporte es colombiano. Además, cuando llegas a hablar con alguien en el extranjero es ineludible pasar por el tema de, ‘¿de dónde eres?, de Medellín. Ah, de ahí es Pablo Escobar’. Por eso estoy de acuerdo con contrarrestar ese pensamiento que nos estigmatiza como raza. Queremos decirle al mundo que nosotros no solo somos narcotráfico”.