“Nuestra Selección dejó atrás los egos”

El equipo tricolor cuenta en el arco con una jugadora de mucho roce internacional.

Sandra Sepúlveda luce nuevo look. Dice que la Liga colombiana elevó el nivel de las jugadoras. FOTO carlos Velásquez

La experiencia que adquirió Sandra Sepúlveda en los dos años que estuvo jugando en la Liga de Israel, aparte de hacerla crecer como futbolista, hicieron de ella una mujer más madura y serena. Lo demuestra bajo el arco de Colombia y en sus actuaciones fuera de la cancha.

Esta jugadora, nacida en el municipio de Bello el 3 de marzo de 1988, es uno de los soportes del seleccionado nacional que participa en la Copa América de Chile, donde lucha por el título que se les escapó en las dos últimas ediciones (2010 y 2014) y por los cupos mundialistas y olímpicos.

Antes del viaje, EL COLOMBIANO habló con la ahora guardavallas de Junior, quien desde 2012 hace parte del combinado patrio, que ha competido en dos mundiales (Alemania-2011 y Canadá-2015) y en dos olimpiadas (Londres-2012 y Río-2016) y que entre los momentos que la han “marcado” recuerda la fractura de tibia y peroné que sufrió en 2014, de la que salió avante.

¿Qué se trajo de Israel?

“Triunfos, pues fui campeona dos años. Regresé a Colombia con experiencia, al ver las grandes diferencias que hay con el fútbol suramericano. Allá tuve una preparación fuerte, porque se trabaja bastante la parte física y la tenencia de balón. Y lo más importante, siempre supe que tenía para aportar seguridad y fortaleza en el arco”.

¿Dejó las puertas abiertas en ese país?

“Claro, tenía la opción de regresar pero quería estar en la liga colombiana que fue una lucha que dimos por mucho tiempo, y también estar cerca de la Selección. Todavía me llaman y me piden que les recomiende jugadoras no solo del país, sino del sur del continente. Nuestra liga jala mucho y hay extranjeras que quieren venir. El nuestro es un fútbol atractivo”.

En Chile se juegan muchas cosas, ¿usted cómo asume este nuevo compromiso?

“La Copa América es algo que nos compromete mucho. Sabemos de la responsabilidad que asumimos como representantes de Colombia. Ya hemos ido al Mundial y a Olímpicos, y de nuevo tenemos esas clasificaciones entre ceja y ceja. Pero el gran reto es salir campeonas. Todo esto que nos jugamos nos impulsa a prepararnos mejor, a ser más disciplinadas. Cada día es un reto mayor”.

¿Qué opina del equipo que se conformó?

“Este grupo me gusta. La diferencia es que cada una de las integrantes pone a disposición del profesor Nelson Abadía todo su potencial, sus habilidades. Se ha dejado un poco ese ego que siempre había en la Selección. En la Liga a las compañeras les ha tocado luchar por ser titulares con sus clubes, entonces vienen con humildad, más experimentadas y aterrizadas, y eso le da un toque especial al plantel. Nos hemos unido mucho, aparte del buen trabajo sicológico; este es un equipo compacto”.