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Masacre de Segovia, herida abierta después de 29 años
Se conmemoraron el pasado sábado 11 de noviembre. Algunas familias relatan el dolor producido por los paramilitares.
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Prácticamente todo el pueblo asistió a las ceremonias religiosas que se realizaron para despedir a las 43 víctimas de la masacre perpetrada por paramilitares. FOTO Hervásquez, Archivo El Colombiano
13 de noviembre de 2017
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El ruido de las ráfagas de fusil que acabaron con las vidas de 43 personas en Segovia, Antioquia, hace 29 años, se vuelve a escuchar en la mente de los familiares de las víctimas y de los habitantes de este municipio ubicado en el nordeste de Antioquia cada 11 de noviembre.
Las imágenes de los hombres armados, irrumpiendo desde sus camperos y disparando a todo lo que se moviera e ingresando, incluso hasta las casas, reviven el dolor de la que fue la primera masacre cometida esa zona.
El pasado sábado, para conmemorar la memoria de las víctimas, los segovianos salieron a las calles a recordar a sus amigos y familiares, quienes fallecieron en la acción cometida por el grupo paramilitar Muerte a Revolucionarios del Nordeste, bajo órdenes de Fidel Castaño, que cobró con sangre que en aquella población, la Unión Patriótica ganara la Alcaldía en las elecciones de marzo de ese año.
Sigue abierta
Para Faisully Calle Bedoya, hija de Jesús Emilio Calle, unas de las 43 víctimas, esta herida sigue abierta en los familiares de quienes fueron asesinados.
Aunque apenas tenía tres años de edad cuando ocurrió, recuerda que su padre se dedicada a despachar carros que se dirigían a La Cruzada y Remedios y que no tenía ninguna filiación política, razón por la que los paramilitares se ensañaron contra el municipio.
Calle Bedoya recuerda lo que comenta la familia, aunque por el dolor que representa, del tema poco se habla. Explica que en esa noche de viernes “en el barrio estaban recogiendo bolsas plásticas para hacer arreglos de Navidad y empezaron con la bulla de que habían unos muertos en el parque”.
Después del rumor, su padre apareció por la calle conocida como “La Reina” y en ese momento los paramilitares lo asesinaron de tres disparos. “Mi familia siempre ha dicho que él no tenía nada que ver con política, pero lo mataron”.
Jhony Andrés Múnera, habitante y conocido líder de este municipio, está de acuerdo con Faisully, al admitir que ese dolor nunca se borrará de quienes habitan allí y que serán los encargados de que la memoria no se pierda.
“La noche de ese viernes nunca la vamos a olvidar, por eso, cada que se cumple la fecha, saldremos a recordar a nuestras víctimas”, recalcó Múnera.
Faisully resalta que, aunque se han hecho procesos de reparación colectiva, como el perdón que pidió el Estado como responsable de los hechos, son muchas familias que aún esperan reparación integral y garantías de no repetición. “A nadie de mi familia han reparado, lo que hemos hecho es esperar y que nos digan cómo será el proceso”, concluye.
Cabe recordar que por estos hechos, el exdiputado antioqueño César Pérez fue sentenciado a 30 años de cárcel por la Corte Suprema, al considerarlo determinador de la masacre. En septiembre pasado le fue concedida la prisión domiciliaria.
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