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La construcción de la calzada oriental de la Avenida Regional, margen derecha del río entre Mayorca y la quebrada La Ayurá, jurisdicción de Envigado, generó una nueva controversia ambiental metropolitana por las talas que implicará la obra.
Juan Carlos Barba, subdirector encargado de Proyectos del Área Metropolitana del Valle de Aburrá (AMVA), explicó que la resolución otorgada por la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales otorgó el permiso para talar 743 árboles.
Sin embargo, tras replantear en campo, los cortes bajaron a 475. Añadió que en el corredor a intervenir, de 4,2 kilómetros, se inventariaron 2.480 árboles, de los cuales permanecerán 1.999 y serán trasladados 939. La compensación será de 2.269 individuos, según Barba, en el mismo sector y en las riberas de La Ayurá.
“Todos serán en Envigado. El proyecto quedará con 4.268 árboles en total”, prometió.
Cristian Álvarez, habitante de Itagüí y usuario habitual de la vía, consideró que la información a la comunidad sobre la tala no ha sido clara. Dijo que son más las dudas que las certezas que tiene sobre el componente ambiental de la obra.
“En este sector se necesitan árboles. No sabemos cuántos se cortaron, cuántos se replantarán y qué está pasando con la madera”, cuestionó.
Hilda Castaño, líder ambiental de Envigado, aseguró que los proyectos de infraestructura metropolitanos se están ejecutando con “modelos depredadores del territorio”.
Afirmó que con la ejecución de la distribuidora se afectará la estructura ecológica de la zona. “Ahora, con una obra en curso, no se pueden hacer peticiones, pero si esperamos que el AMVA garantice la calidad del aire”, dijo.
Por su parte Juan Carlos Valencia, integrante del colectivo Túnel Verde, manifestó su preocupación por los efectos que las talas tendrán en Envigado, porque, mencionó, a estas se les sumarán los cortes previstos en otras obras próximas como el intercambio vial de La Ayurá y la ampliación de la avenida Las Vegas. “La pérdida ambiental será notoria, la reposición tiene que hacerse en la zona urbana”, manifestó.
Valencia también criticó que el AMVA no generara espacios de participación, en los que los ciudadanos pudieran proponer nuevos espacios verdes. “Se debe concertar. El problema de estas obras es que se imponen y no hay espacios para debatir”, indicó.
José Fernando Álvarez, de la mesa ambiental de El Poblado, dijo que en la ejecución de las obras de valorización en esa comuna ha habido avances en la concertación con la comunidad. “Los conflictos ambientales se generan por no abrir espacios de consenso antes de empezar las obras. Necesitamos vías pero de manera concertada”, añadió.
El subdirector indicó que durante la estructuración de la obra hubo buena relación con los colectivos y que ellos dieron visto bueno al corredor. Mencionó que han hecho 17 socializaciones de diseño y de inicio de obra, con convocatorias en los sectores intervenidos y con 720 asistentes.
“La gente pasa y, sin información, genera alerta. Es razonable que esto suceda, a veces son sacrificios necesarios aunque vamos a generar nuevos corredores con la compensación ambiental”, concluyó .