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El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, se refirió a un trino hecho por la Fiscalía este sábado en el que se pedía detener los operativos de seguridad ciudadana por hacinamiento carcelario, pues los capturados estaban siendo conducidos al auditorio pues los calabozos ya estaban llenos.
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“Los operativos deben continuar. Yo estoy de acuerdo con el Fiscal General en la preocupación que tiene que es la mía, no puede ser que tengamos ese hacinamiento carcelario tanto en Fiscalía como estaciones”, afirmó Gutiérrez.
El alcalde agregó que la Fiscalía tiene la capacidad para tener 50 detenidos y hoy tienen 142 y la policía capacidad en sus estaciones para 255 detenidos y tiene 1.213.
“Si paramos la operatividad los únicos que ganan son los delincuentes. Más bien lo que hay que hacer es un llamado a que se solucione rápido esta situación. A que los traslados que se habían comprometido, tanto el Inpec como el Gobierno para llevar presos de Medellín a otras cárceles como El Espinal Tolima, se cumplan y podamos seguir con estas capturas”, agregó Gutiérrez.
“Nos tienen que resolver. Lo que no puede pasar es que esta gente que le hace tanto daño a la ciudad siga en la calle haciendo daños”, concluyó Gutiérrez.
Los capturados terminaron en el auditorio
Según el ente investigador, los últimos capturados tuvieron que ser conducidos al auditorio de la Fiscalía, luego de que se presentara hacinamiento en la Sijín, estaciones de policía y demás lugares donde deben recibir detenidos mientras el Inpec recibe a los capturados.
La Fiscalía expresó además que en sus salas de paso hay 140 personas recluidas en un espacio diseñado para 50. Y agregó que se han presentado 20 casos de intoxicación al parecer por alimentos en descomposición que fueron suministrados por el Inpec.
“Entre las personas privadas de la libertad figuran procesados que ya están condenados y cuyo sitio de reclusión, de acuerdo con el código penitenciario, deberían estar en penitenciarías cumpliendo con su proceso de resocialización”, afirmó el ente investigador en un comunicado.
El grado de hacinamiento en los calabozos de la Fiscalía obligó a disponer de investigadores, con funciones de policía judicial, al cuidado de los internos limitando el trabajo operativo en procesos penales de vital importancia para la seguridad de la ciudad.
En abril, según un informe de la Personería, el hacinamiento en 15 estaciones de Policía llegó a niveles alarmantes del 308%. Las estaciones con más capturados fueron Candelaria con capacidad para 40 personas y que actualmente alberga a 238; Laureles que puede recibir 15 reclusos y tiene 89; y Buenos Aires, con cupo para 8 internos y en la que están 41.