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Lo que pasó en Palmitas no pasaría en el Metrocable

Se desconoce la causa del incidente en cable de Palmitas. El sistema se cerró indefinidamente.

  • En total, doce horas y un poco más duró el rescate de las cuatro personas que el domingo quedaron atrapadas en una cabina del cable del corregimiento Palmitas. La operación requirió el máximo cuidado para evitar que hubiera víctimas. FOTO Róbinson sáenz
    En total, doce horas y un poco más duró el rescate de las cuatro personas que el domingo quedaron atrapadas en una cabina del cable del corregimiento Palmitas. La operación requirió el máximo cuidado para evitar que hubiera víctimas. FOTO Róbinson sáenz
26 de junio de 2018
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Aunque fueron rescatadas con vida y no sufrieron la más leve lesión, las cuatro personas que ocupaban la cabina del cable de Palmitas que colapsó el pasado domingo vivieron un gran riesgo de irse al abismo debido a que las puertas del módulo quedaron mirando a tierra. Y esto, además, complicó el salvamento.

Así lo relató a EL COLOMBIANO Sergio Mira, el piloto del helicóptero de Brac -Grupo de Búsqueda y Rescate Aeronáutico de Colombia- que encabezó la operación, la cual tuvo que realizarse con extremo cuidado para evitar cualquier riesgo. Si esa puerta se hubiera abierto, el desenlace habría sido fatal, advirtió.

“Inicialmente, se nos dijo que los rescatistas no podían agarrarse del cable, porque este no resistiría el peso, y por eso la primera llegada a la cabina fue con el rescatista prendido a una cuerda del helicóptero; ya más tarde nos confirmaron que el cable sí resistiría el peso y los socorristas pudieron aferrarse a él para llegar hasta ellos”, narró Mira.

Señaló que cuando el rescatista llegó a la cabina, a los ocupantes -una bebé, su madre, su padre y su abuelo- se les dio herramientas para que rompieran los vidrios para poder extraerlos por allí: “si se abría la puerta, ellos caerían al abismo”, recalcó el piloto.

A las 11:30 p.m. fueron rescatadas la madre y su niña y a las 2:40 a.m. de ayer lunes fueron extraídos el padre y el abuelo de la menor, confirmó el director (e) del Dagrd, Jaime Enrique Gómez. La emergencia se presentó hacia las 2:30 p.m. del domingo.

Investigación

Los motivos por los cuales el cable cedió son aún desconocidos para los operadores, que anunciaron un peritaje a todo el sistema con el fin de hacer claridad y establecer los correctivos para evitar que un riesgo similar vuelva a ocurrir.

Por el momento, el cable, que es de uso comunitario y que comunica varias veredas de este corregimiento del Occidente de Medellín, estará cerrado mientras se repara.

Ovidio Buitrago, gerente de Terminales de Medellín, que opera el sistema en convenio con la Secretaría de Infraestructura, precisó que el último mantenimiento del sistema se hizo en mayo pasado.

“La empresa que lo hace tiene toda la experiencia y el conocimiento del tema, están los registros y protocolos de cómo se hizo y venía funcionando sin dificultad”, señaló.

Sin embargo, consciente de lo importante que es este sistema para la comunidad de Palmitas, se buscará que la reparación tarde el menor tiempo posible para ponerlo a funcionar con todos los protocolos de seguridad.

Metrocables, muy seguros

¿Pero hay riesgo de que en los metrocables ocurra una situación similar?

Jorge Ramos, jefe de Cables de la empresa Metro, precisa que los sistemas no se pueden comparar, pues mientras el de Palmitas funciona con una tecnología en vaivén, con una cabina que sale de una estación superior y la otra de una inferior, los metrocables, en todas sus líneas, operan con la tecnología GMD (Góndola Metrocable Desenganchable), con cabinas sujetas a un único cable que entran y salen de las estaciones, en las que se desganchan y hay sistemas propios que las siguen moviendo.

Señala que se usa el reglamento francés, con un plan de mantenimiento que se extiende a lo largo de todo el año, que incluye el sistema de tensión, las plataformas de electromecánica y las cabinas, con periodicidad mensual, bimestral, semestral y anual.

“También se les hace mantenimiento a la línea, las pilonas, el cable multipar, el tractor y todo queda consignado en un documento que se llama Plan de Mantenimiento de Cables, que dicta diariamente las intervenciones a hacer en cada sistema”, señala Ramos.

Hay ajustes en el día, con el cable en movimiento, y en la noche, cuando para el sistema.

Los metrocables también tienen los mantenimientos predictivos, que se le hacen al reductor de velocidad y que miden las vibraciones y la calidad del lubricante. Abarcan, además, los motores eléctricos y los sistemas de tensión.

Adicional, están los mantenimientos mayores, que se hacen anualmente a cada una de las líneas, que incluyen todo el sistema y que obligan al cierre de la operación durante varios días.

Precisamente, este sábado 30 de junio arranca en la Línea J (San Javier) y se extiende hasta el 5 de julio; entre el 9 y el 12 de julio se hará en la Línea L (Arví); del 11 al 14 en la Línea H (Oriente-Villa Sierra); y del 15 al 22 de julio, el turno es para la Línea K (Santo Domingo), informó Ramos .

1.000
personas mueve cada mes el cable de Palmitas, que se verán afectadas por el cierre.
El empleo que busca está a un clic

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