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La FLA apretó a sus distribuidores

  • En 2017 la Gobernación de Antioquia recibió de la FLA $928.000 millones. Este año espera una transferencia del orden de $980.000 millones. Foto Archivo El Colombiano.
    En 2017 la Gobernación de Antioquia recibió de la FLA $928.000 millones. Este año espera una transferencia del orden de $980.000 millones. Foto Archivo El Colombiano.
10 de noviembre de 2018
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Entre lo que falta de noviembre y diciembre de 2018, los distribuidores de la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA) tendrán que comprarle a esta empresa productos por valor de $850.000 millones.

Según Luis Pérez Gutiérrez, gobernador de Antioquia, las metas están firmadas por escrito y quien incumpla no iría más como distribuidor.

“El gerente me informa que ese es el compromiso”, le dijo el mandatario a EL COLOMBIANO.

Pérez indicó que recibió la FLA con una facturación de $750.000 millones y “hemos superado todas las metas de ventas de toda la historia de la Fábrica de Licores y hemos superado las metas del Plan de Desarrollo”.

De acuerdo con el subgerente de Mercadeo de la FLA, Carlos Eduardo Álvarez, para este año se calcularon ingresos por $1,4 billones.

Los datos aportados por Pérez Gutiérrez, de memoria, señalan que el presupuesto es de $1.3 billones. Al cierre de octubre se habían vendido en licores $465.000 millones, equivalentes al 35,7% de lo planeado para todo el año.

No obstante, el gobernador destacó que, por informaciones del gerente de la FLA, Iván Correa Calderón, “ya se tienen prepedidos de los distribuidores por $850.000 millones”.

¿Y el crédito del Idea?

Información a la que tuvo acceso EL COLOMBIANO revela que entre los distribuidores Alima, Dispresco e Interlicores le solicitaron al Instituto para el Desarrollo de Antioquia (Idea) un crédito por $580.000 millones.

La cifra causó inquietud en el Instituto.

Bajo reserva de su nombre, una fuente del Idea comentó que en julio de 2018 recibieron un mensaje de los mismos comercializadores: como para ese mes las ventas no pasaban del 13% de lo presupuestado, pedían que les cambiaran el plazo y la tasa de interés de los créditos que allí habían tomado.

El Idea entendió, desde entonces, que como las registradoras de sus clientes no estaban sonando a satisfacción, porque el mercado se contraía, seguir financiando a los distribuidores “era correr el riesgo de terminar llenos de guaro”.

El esquema opera así: Los distribuidores solicitan el préstamo. El Idea se los aprueba y el licor queda como garantía en un fideicomiso en las bodegas de la FLA. El dinero se le transfiere a la Secretaría de Hacienda de la Gobernación de Antioquia, que lo puede retirar de una vez o de acuerdo con sus necesidades de recursos.

A medida que el distribuidor paga la deuda, se le libera el licor. Por eso, incumplir las metas de ventas es correr el riesgo de que el Idea pase de ser un banquero a un enorme estanquillo.

¿Cuánto pidió cada distribuidor?

Los datos del Idea muestran que Dispresco solicitó $240.000 millones, pero, dice el Instituto, el máximo valor del crédito que se le podría dar es de $9.293 millones, “según el análisis de la situación financiera”.

El plazo del crédito sería hasta de 360 días, a la tasa DTF más 4,5 puntos, trimestre anticipado.

Alima hizo una petición de $220.000 millones, pero los estudios del Idea indicaron que el máximo a prestar sería de $5.442 millones.

Finalmente, Interlicores pidió $120.000 millones, y los analistas de riesgo consideraron que se le podría prestar, máximo, $40.159 millones.

Patrimonios pequeños

Las cifras de esta misma fuente indican que los patrimonios de los distribuidores no son tan robustos frente a la magnitud del endeudamiento que tramitan.

Dispresco tenía en 2017 un patrimonio de $45.865 millones y a septiembre de este año estaba en $52.320 millones.

El de Alima era de $20.715 millones al cierre del año anterior y al finalizar septiembre de este año registraba un patrimonio de $24.156 millones.

En cuanto a Interlicores, en 2017 tenía $55.148 millones y este año está en $81.369 millones al cerrar el tercer trimestre.

En utilidades netas, el valor más alto, al mes de septiembre de 2018, era el de Interlicores, con $26.222 millones.

A continuación estaba Dispresco, con $6.847 millones.

Por su parte, Alima reportó una ganancia neta fue de $3.443 millones.

Entre 2015 y 2018 las operaciones de financiamiento del Idea a los distribuidores fueron millonarias. En capital, estos empresarios le pagaron al Instituto más de $615.000 millones, mientras que por concepto de intereses cancelaron más de $13.174 millones.

El crédito para el 2018 luce tan complejo, que los analistas de riesgo del Idea aconsejaron comprometer a la FLA a que, en caso de incumplimientos por parte de los distribuidores que son fideicomitentes principales, proceda a vender “el inventario a un nuevo comercializador, en las mismas condiciones del crédito otorgado. Es de anotar que en el evento de no encontrar un nuevo comercializador, la FLA se comprometa a realizar los inventarios de tal forma que se cumpla con el pago de las obligaciones en las condiciones pactadas”.

Así mismo, dijeron los analistas del Idea, “la FLA debe garantizar el bodegaje del inventario en el evento de incumplimiento, sin costos para el Instituto”.

En adición a ello, se recomendó pedir la constitución “de una reserva por el valor de los intereses que generaría cada una de las operaciones, con el fin de cubrir el riesgo por retrasos en la ejecución de la garantía en el evento de incumplimiento. En la medida que realicen abonos a capital, se libera la respectiva proporción de intereses”.

Prefiere renunciar

El solo análisis de las condiciones financieras de los distribuidores, y de las condiciones del deprimido mercado de la FLA, llevaron a que un miembro de la Junta Directiva del Idea advirtiera que prefería renunciar a su cargo, antes que darle el visto bueno a esa financiación.

La negativa del crédito desata una cascada de efectos negativos.

Los distribuidores necesitan ese capital para financiar sus compras a la FLA. El más vulnerable es Dispresco, por las razones que luego se explican.

La FLA, a su turno, requiere de esa operación para poder cumplir sus metas de ventas.

Y el Gobernador, también le hace fuerza al tema, porque en la cuerda floja se encuentran las transferencias que le hace la FLA, y que son fundamentales para pagar hasta la nómina. Solo este año espera casi un billón de pesos de esa fuente.

Analistas consultados por EL COLOMBIANO consideran que Pérez queda en una situación muy dura, porque a la hora de buscar recursos alternativos en la banca, lo limita el alto endeudamiento del Departamento de Antioquia.

Una buena medida de lo que está en juego la da el ultimátum de la FLA a los distribuidores, en el sentido de que quien incumpla con su cuota de compras para fin de año, se queda por fuera del negocio.

No da para tanto

Según Liz Margaret Álvarez, gerente General del Idea, la entidad no puede otorgar un crédito a los distribuidores por $580.000 millones. “Tenemos limitaciones legales relacionadas con el patrimonio técnico del Instituto”.

Por su parte, el gobernador Luis Pérez manifestó que

desde hace 15 años el Instituto les presta dinero a los distribuidores de la FLA al final del año “y ellos pagan empezando el año. Los préstamos no son de fomento. Son comerciales, en buenas condiciones para el Idea”.

A la pregunta de si había dado instrucciones para que se aprobara ese crédito, superior al medio billón de pesos, el gobernador de Antioquia respondió que “los distribuidores solicitaron una cifra muy grande, cercana a la Usted menciona. El Idea, por prudencia financiera, está estudiando aprobar cifras cercanas a las de años anteriores, actualizando con el Índice de Precios al Consumidor (IPC). La información que recibí con motivo de su llamado es qué hay concepto positivo hasta ahora por $180.000 millones”.

Ese préstamo, según lo confirmó la gerente del Idea, se estudia para las firmas Alima e Interlicores.

¿Y Dispresco?

Por las declaraciones del Gobernador y de la gerente del Idea, ya no estaría sobre la mesa la solicitud de crédito de Dispresco.

Esta firma, en concepto de analistas del Idea, representaba para la entidad un riesgo reputacional, porque entre los beneficiarios de ese crédito millonario se encuentra un distribuidor que está en el ojo del huracán por el escándalo de presunta corrupción en San Andrés y Armenia.

Así quedó consignado en un documento del Idea, que sirve de soporte para la operación de financiamiento a los distribuidores de la FLA, y que textualmente advierte lo siguiente:

“El área de riesgos informa que hay un riesgo reputacional para el caso del comercializador “DISPRESCO S.A.S.” ya que el Instituto o la Fiduciaria Central podría verse expuesta a un Riesgo Reputacional, toda vez que en el medio circulan noticias que hacen referencia al señor Mauricio Botero Restrepo, quien es esposo de la señora Adriana María Escobar M. Representante Legal Suplente y Socia en compañía de sus hijas de la firma PSM Alianza S.A.S.; y con el 12,50% la hermana de la señora Adriana María Escobar M. “Poliana Escobar Mejía”, con lo anterior se podría deducir por lo que el señor Mauricio Botero Restrepo puede ejercer influencia directa sobre su familia y sus decisiones en las empresas donde se tiene participación. Es de anotar que las noticias son de este año 2018”.

A renglón seguido, el mismo documento define el riesgo reputacional como “la posibilidad de pérdida en que incurre el Instituto por desprestigio, mala imagen, publicidad negativa, cierta o no, respecto de la entidad y sus prácticas de negocios, que causa pérdida de clientes, disminución de ingresos o procesos judiciales”.

Les pega el tema

En forma indirecta, el Gobernador y el gerente de la FLA son tocados por el espinoso asunto.

En efecto, Mauricio Botero Restrepo es socio en Furel de Hernán Moreno Pérez, el empresario que Luis Pérez Gutiérrez nombró como miembro del Consejo Directivo de la Universidad de Antioquia.

Moreno Pérez está preso. La Fiscalía lo acusa por el presunto detrimento patrimonial de 20.000 millones de pesos en obras no ejecutadas, que salieron del cobro de valorización hecho a los habitantes de la ciudad de Armenia en el año 2015.

Iván Correa Calderón, exgerente de EPM en la alcaldía de Luis Pérez y actual gerente de la FLA, fue gerente General del Grupo Furel, como se lee en la hoja de vida publicada en la página web de la licorera antioqueña.

Consultado sobre esto, el gobernador dijo que “el Doctor Iván Correa es una persona decente. Amigo suyo. No sea venenoso”. (Al mandatario se le aclaró que la relación con Correa ha sido siempre de periodista a fuente).

De la alerta de los analistas de riesgos del Idea, el gobernador sostuvo que “eso lo deben leer en la Junta. Los dos préstamos que se aprobaron no están en riesgo reputacional. Eso me informa la gerencia”.

La gerente del Idea aseguró que las observaciones de los analistas de riesgos “son alertas que se generan y se exponen en la Junta. La decisión que se toma frente a la valoración del riesgo, se toma conforme a la ley y los estatutos. No se basan en suposiciones. Cada crédito es evaluado rigurosamente desde lo legal, lo económico y lo técnico”.

La funcionaria manifestó que la Junta del Idea será citada en los próximos días para mirar las solicitudes de crédito de los distribuidores de licores de la FLA.

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