Valle de Aburrá busca planificarse a 2050

El Área Metropolitana y la universidad Eafit diseñan una herramienta que permitirá planificar el crecimiento acorde con la capacidad del territorio.

En los límites entre Medellín y Bello se nota cómo los municipios se afectan entre sí. Por eso nace la necesidad de una planificación regional que haga viable el territorio. FOTO Esteban Vanegas

El Valle de Aburrá es un territorio de 1.156 km2 en el que (según censo del Dane de 2005), habitan en total 3’821.797 personas que, se calcula, a 2050, serán más de 5’600.000. ¿Tendrá el territorio la capacidad para abastecer, con los servicios básicos, a toda esta población?

El Área Metropolitana de Medellín y el Valle de Aburrá (AMVA) admite que la respuesta es incierta. Por ello, en asocio con el Centro de Estudios Urbanos y Ambientales (Urbam), de la universidad Eafit, trabaja en la elaboración de una herramienta llamada DensUrbam, que le permitirá medir la carga ambiental, simular futuros escenarios de ocupación y estudiar su capacidad de crecimiento.

Si hoy se afrontan problemas de contaminación auditiva y del aire, de abastecimiento de agua, de transporte y movilidad, y de equipamientos, ¿cómo será cuándo la población se desborde?

“Si hablamos de un modelo de ocupación centralizado hacia el río, de respetar las laderas para tener un cinturón verde metropolitano, DensUrbam nos puede dar insumos para identificar el espacio y orientar las obligaciones urbanísticas”, apunta Víctor Piedrahíta, subsecretario de Planeación del AMVA. Se trata de pensar, desde ya, cómo se va a ocupar el territorio.

Según Óscar Mejía Rivera, coordinador de Urbam y director del estudio, “no se puede planear el territorio si no se comprenden bien sus capacidades en función de lo que ofrece y necesita”.

Cuatro preguntas

Con dos expertos en planificación urbana analizamos cuatro de las preguntas básicas que abordará el estudio, que estará listo en septiembre.

Una: ¿Qué hacer frente al crecimiento poblacional desbordado?

Carlos Mauricio Hernández, ingeniero y consultor en temas metropolitanos: “Hay que frenarlo con control natal. Operando a los hombres por una razón sencilla: una mujer solo puede tener un embarazo al año. En los hombres esto es ilimitado”.

Diego Zapata Córdoba, experto en transporte y planificación urbana: “El Aburrá no puede seguir soportando la carga poblacional, hay que potenciar nuevos polos de desarrollo en otras regiones de Antioquia”.

Dos: ¿Cómo garantizar el abastecimiento hídrico?

CMH: “EPM tiene que ampliar la cobertura en municipios como Barbosa, Caldas y Sabaneta. Incluso, tomar agua del río Medellín desde su nacimiento. Los acueductos veredales ya agotaron su capacidad en estas zonas”.

DZC: “Hay que afrontar el problema desde un escenario de cambio climático; hay mayor propensión a eventos climatológicos extremos y, si no velamos por la cualificación de las fuentes hídricas, habrá más avenidas torrenciales”.

Tres: Hoy el parque automotor regional es de 1’347.736 vehículos y se duplicará a 2030, según el Amva. ¿Cuál es el camino en este caso?

CMH: “Hay que incentivar el transporte eléctrico. Motivar el uso de bicicletas, pero ya se cometió un error grave: la Variante a Caldas se hizo sin ciclorrutas. Y si no hay equipamientos para usar las bicicletas, no hay nada qué hacer. Eso pasó por ser una vía nacional. El AMVA debe tener, también, la autonomía sobre las vías nacionales”.

DZC: “La principal medida es una política de gestión de estacionamiento en la ciudad y los municipios; para que crezca la red vial hay que sacrificar otro tipo de espacios en una región que ya afronta problemas en este sentido. Todos sabemos que la movilidad afecta la competitividad y la economía, además del ambiente”.

Cuatro: ¿Cómo plantear un desarrollo urbanístico que no desborde la capacidad del territorio?

CMH: “No se pueden seguir permitiendo densidades de mucha altura, como pasa en Sabaneta, donde ya hay zonas en las que ni el sol entra”.

DZC: “Tiene que haber un solo POT para todo el Aburrá, a los municipios les tocará sacrificar los suyos propios”.

1,8

millones de habitantes más tendrá el Valle de Aburrá a 2050, según el Amva.