Con vitaminas buscan mejorar la convivencia escolar en Medellín

La idea es llegarles a los estudiantes de instituciones educativas de Medellín con un mensaje de convivencia. Y que mejor que hacerlo de una forma que despierte la curiosidad, como por ejemplo, con pastillas, de colores, similares a las vitaminas, pero que en realidad son dulces con nombres que sugieren un buen comportamiento.

Se trata de una campaña de la Secretaría de Educación local, con la que se busca erradicar de los colegios la violencia escolar, que ha tenido episodios lamentables como el del pasado 31 de enero cuando cuatro estudiantes se agredieron en las afueras del Inem José Félix de Restrepo.

Según la Administración Municipal los complementos vitamínicos, que en realidad son dulces se entregarán en instituciones públicas, privadas y de cobertura. La idea es que también llegue a un alto número de familias.

Los nombres de las pastillas que llegan en un botiquín, son Supradesenfadol, que indica que contiene 50% respiración y 50% autorregulación; Divermax, 50% respeto por las diferencias y 50% empatía; Vita-amor, que está hecho de 70% fuerza transformadora, 15 % dulzura y 15% calidez; Maxconfianza es 50% franqueza y 50 % familiaridad; Vita-felicitín tiene 50% alegrías, 30 % disfrute y 20% lindos recuerdos; y Abrazadol se compone de 50% apoyo y 50% amor.

El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, dijo que, por ejemplo, el Supradesenfadol es “para los que son my bravos”. Destacó que 625 colegios de la ciudad recibirán el particular botiquín pedagógico

“Lo que les pedí a los líderes de instituciones educativas públicas y privadas es que esto llegue a las aulas, a los hogares. La convivencia tiene que arrancar por casa, el respeto del papá, la mamá, hijos y hermanos. Si tenemos hogares felices, tendremos barrios felices, y por ende, una ciudad feliz”, enfatizó.

De acuerdo con el reporte de Gutiérrez, entre el 20 y 30 por ciento de los homicidios en Medellín se dan por problemas de convivencia de los que hacen parte familiares, amigos, vecinos o personas conocidas entre sí.

“Han mejorado los niveles de convivencia escolar, pero todavía falta mucho. Que nos respetemos, que entendamos que somos diferentes y que pensamos distinto. Que se tomen esas vitaminas juiciosos”, concluyó el alcalde.