<img height="1" width="1" style="display:none" src="https://www.facebook.com/tr?id=378526515676058&amp;ev=PageView&amp;noscript=1">
x
language COL arrow_drop_down

Animales que suman y restan

La capacidad matemática no es solo de los humanos. Estos son unos casos llamativos.

  • ilustración Elena ospina
    ilustración Elena ospina
13 de junio de 2018
bookmark

De la inteligencia de las abejas no queda duda: saben que nada es distinto de algo y pueden poner el cero al final de una secuencia numérica.

Entienden el cero, tal como los delfines, la lora gris africana, algunos primates no humanos y los niños.

Las matemáticas no son una habilidad exclusiva del Homo sapiens. Están en muchas otras especies y grupos animales, que tienen un sentido de la cantidad y que distinguen no solo grande de pequeño, más de menos y también dos de cuatro y cuatro de diez.

El estudio en Science que demostró el entendimiento del concepto cero en las abejas se añade a la habilidad matemática de estos insectos sociales. Estudios mostraron en el pasado que Apis mellifera puede contar hasta cuatro objetos.

“He dicho que no me sorprende ningún comportamiento inteligente de las abejas, pero este sí lo hizo”, dijo Lars Chittka, biólogo del comportamiento en Queen Mary University of London.

En el nuevo estudio, los insectos lograron distinguir un pedazo de papel limpio como ‘menos que’ uno con algunas manchas.

“Entienden que hay una especie de distancia numérica”, explicó Scarlett Howard, biólogo de RMIT University en Australia, cabeza del estudio. “Esa es una etapa importante de entender cero”.

Lo básico

Si es algo innato todavía no se sabe. Lo que sí tiene claro la ciencia hoy es que la capacidad de hacer cálculos está extendida por los animales.

No se crea que solo está reservada a los mamíferos. Algunas arañas, por ejemplo, han demostrado esta habilidad: saben cuántas presas hay atrapadas en sus telarañas, algo comprobado cuando los investigadores retiraron unas.

Muchos otros dependen de evaluar con certeza dónde está la mayor cantidad de individuos de la especie para buscar protección o tener ventajas en un ataque en busca de alimento.

Fue hace unos 80 años que experimentos controlados mostraron que los cuervos podían realizar tareas numéricas simples.

Sin embargo, hasta hace medio siglo todavía la ciencia consideraba que las matemáticas eran exclusivas de los seres humanos, lo que fue cambiando poco a poco.

Y hay casos muy llamativos que se han encontrado.

Los peces pequeños, por ejemplo, se benefician de andar en bancos y es importante distinguir cuál es el más numeroso, porque están más protegidos frente a los depredadores.

Los peces gupis pueden distinguir entre 4 y 5, y entre 8 y 10 gupis, y si tienen oportunidad, nadan hacia el grupo más numeroso.

Es mayor la capacidad de los peces espinosos (Gasterosteus aculeatus), que discriminan 6 de 7, o 18 de 21.

Un estudio en Science, en 2006, reveló que las hormigas del desierto contaban sus pasos para encontrar el nido al regreso. Cuando les alargaban o recortaban sus patas, no daban con él.

Cantos y conteos

Algunas ranas como la túngara, agrega dos notas si hay un macho que conteste y este debe seguir el paso, agregando otra. Cantan rápido hasta seis o siete y si el macho se equivoca es como haber terminado la conversación.

Los leones, las hienas y los lobos evalúan el número de conespecíficos (poblaciones o razas que pertenecen a la misma especie) con base en llamadas y respuestas. Así saben si pueden atacar o deben huir.

Gallus gallus, el gallo común, no tiene nada de tonto, como se cree. Es capaz de discriminar entre distintos números de objetos y resuelve problemas elementales de suma y resta.

En los monos macacos se destaca la capacidad mental para hacer sumas, similar a la de algunos estudiantes, según un estudio publicado en Plos Biology.

También los chimpancés tienen grandes habilidades: aprenden a asociar grupos de objetos con números arábigos hasta 9 (algunas veces van más allá).

Y en el caso de los perros, parece que pueden tener un sentido de los números aunque no lo usan de acuerdo con varios estudios.

Para los científicos no están claras las bases neurológicas de estas capacidades entre especies que divergieron de un ancestro común hace millones de años.

¿Herencia? Podría ser.

0
es un concepto que muy pocos animales comprenden y por eso se destaca el caso de las abejas
76
por ciento de las veces acertaban los monos macacos en las sumas mentales en uno de los experimentos

Te puede interesar

El empleo que busca está a un clic

Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD