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A este hombre en Medellín lo han capturado 18 veces por ladrón
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FOTO CORTESÍA
Alexánder Sánchez, a secas. Ese es el nombre completo que figura para la cédula de ciudadanía 71.733.329.
Las reseñas judiciales en su contra lo muestran como un curtido delincuente que en su haber tiene capturas por parte de policías por los delitos de daño y violación de habitación en bien ajeno (enero de 2006 y noviembre de 2014); tráfico, fabricación o porte de estupefacientes (julio de 2008) y hurto calificado (julio de 2002, septiembre de 2007, enero y septiembre de 2008, julio de 2011, octubre de 2014, marzo, abril y mayo de 2015).
Su vida en el mundo de los robos lo ha llevado a ser condenado en 5 ocasiones por jueces penales del Circuito de Medellín. Han sido penas cortas o que le han permitido dejar la cárcel y volver a la calle rápidamente por las gabelas que da la legislación colombiana. El 27 de septiembre de 2002 lo sentenciaron a 2 años y 9 meses, el 21 de enero de 2008 a 10 meses, el 5 de febrero de 2009 a 18 meses, el 25 de octubre de 2011 a 2 años y el 22 de noviembre de 2013 a 7 meses.
En uno de esos procesos, el del 2009, aceptó los cargos que le imputaron por hurto calificado y tuvo que indemnizar a la víctima con $130.000.
Ni le pidieron cárcel
También ha sido favorecido porque en los estrados judiciales, los fiscales que han presidido las audiencias preliminares en su contra solo han solicitado la legalización de la captura y han desistido de imputarle delitos y de solicitar medida de aseguramiento en centro carcelario o domiciliario. En informes del Palacio de Justicia de Medellín, de la Procuraduría y de la Rama Judicial, queda claro que eso sucedió el 9 de septiembre de 2007, el 29 de octubre de 2014 y el 2 de marzo y 1 y 13 de abril del año en curso.
Pero no solo ha contado con suerte por la manera de proceder de los representantes del ente acusador e investigador. El 27 de abril de 2015, en la tercera vez que era detenido durante ese mes, la fiscal le imputó cargos por hurto calificado y agravado y el juez 23 Penal de Medellín con función de control de garantías lo dejó libre. Esa decisión fue apelada y, posteriormente, el 22 de mayo, el Juzgado 21 del Circuito la revocó, por lo que le expidieron orden de captura porque en ese momento ya era un procesado ausente.
Lo más irrisorio es que para ese momento ya estaba privado de la libertad en la cárcel Bellavista. Lo sorprendieron robando el 16 de mayo anterior y otro togado lo envió a prisión. Luego hizo un preacuerdo con la Fiscalía que le representó solo 3 meses de condena. Por eso dejó las rejas el 5 de agosto, sin deber nada en ese proceso.
Pero volvió a las suyas. El pasado lunes fue sorprendido por policías de la estación de la comuna 11 (Laureles Estadio), después de haber ingresado a un parqueadero de la carrera 77B con calle 48, para forzar la chapa de un carro y robarse una mercancía que había adentro, de 24 champús y 24 bálsamos.
Otra vez volvió al Palacio de Justicia de Medellín, donde una fiscal le imputó cargos y le pidió al juez que lo enviara a prisión. “Tiene 18 anotaciones por hechos similares”, recordó el titular del despacho al acceder a esa pretensión.
Alexánder Sánchez, el de la cédula de ciudadanía 71.733.329, no demostró la menor preocupación ante esas palabras que le implicaron ser nuevamente un inquilino de Bellavista, mientras espera que lo condenen por sexta vez o que la ley colombiana le permita volver a las calles donde no ha parado de robar.
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